En el Estadio Nacional de Brasilia, el Mané Garricha, abarrotado por 67 mil 423 espectadores que se dieron cita para vivir el primer encuentro de este torneo antesala del Mundial Brasil 2014.
Veinticuatro horas después que el gobierno de Rio de Janeiro había atribuido la gestión del recinto por 35 años a un consorcio de empresas brasileñas, un juez bloqueó este viernes la firma oficial del contrato debido a ilegalidades en el proceso de licitación.