Londres.- Los ecos de la boda del siglo continúan más fuertes que nunca en el Reino Unido. Esta vez la población, los periodistas y hasta las autoridades tienen como principal punto de discusión en el país el controvertido vestido que usó ayer Pippa Middleton.
Y es que la hermana del la ahora princesa Catalina se apareció en la abadía de Westminster con un vestido blanco del diseñador Alexander McQueen –el mismo del traje nupcial– y provocó el escándalo entre los sectores más conservadores de la sociedad británica.
Y es que en el país europeo –como en algunos otros países, entre ellos el Perú– forma parte del estricto protocolo de la bodas que las invitas a las ceremonia no lleven un traje blanco para evitar opacar a la novia en su día más especial.
Y Pippa no solo lo llevó blanco, sino que además lució una figura de infarto al punto que todos tenían que ver con el trasero de la cuñada más famosa de la sociedad británica.
Desde Facebook se creó una cuenta solo para apreciar las curvas de la hermana de la princesa que lleva, hasta el cierre de esta nota, más de 600 millones de seguidores.
La crítica especializada en la prensa inglesa señaló hoy que si bien el vestido de Pippa era hermoso su elección, para una ceremonia que siguieron más de 1,000 millones de personas, fue desafortunado.
Muchos, sin embargo creen que la joven no habría usado el traje sin la propia aprobación de Catalina, quien no previó todo el revuelo que se ha armado.