Berlín.- Puede parecer una broma, pero no, lo toma muy en serio. Annelie Buntenbach, dirigente de la influyente sindical alemana DGB, señaló que promoverá en el país germánico el derecho a la siesta para los millones de trabajadores afiliados.
Según explicó la dirigente a través de un artículo publicado en el diario de izquierdas Tageszeitung, “una pequeña siesta reduce el riesgo de infarto y permite levantarte lleno de energía”.
Buntenbach sostuvo que la iniciativa no es una locura pues en otros países de Europa, como España y Francia, se trata de una práctica nacional.
Un informe publicado recientemente revela que los alemanes trabajan al año en promedio 1,390 horas, muy por debajo a otros países como Grecia –2,119 horas–, España –2,178 horas –, e Italia –1,773 –.