El norteamericano Robert James Moore fue hallado muerto una isla ubicada cerca al Palacio Real en Londres.
Según informó la policía el sujeto fue hallado con dos botellas de vodka, nadie se había percatado de su presencia en dicho lugar hasta el mes de marzo de este año, cuando se realizaba un mantenimiento al lugar que está a menos de 100 metros del Palacio de Buckingham.
Durante estos días el Instituto Forense de Westminster reveló algunos detalles curiosos sobre Moore, como que fue alcohólico y tenía una obsesión por la reina Isabel II, motivo por el cual se mudó en el 2007 de Estados Unidos a Inglaterra.
Hasta el momento el Palacio Real no se ha manifestado sobre el caso dejando toda la investigación a la Policía.