Proyecto Minero Conga y su relevancia política

Toda comunicación, sea mono  o multimedia, expresa la posición ideológica del emisor y del receptor, pudiendo el mensaje no tener la misma percepción en el uno y/o en el otro. El recado de cualquier mortal va o viene según la apreciación que los actores tengan sobre el hecho, es decir, todos ponen lo suyo, nadie, incluidos científicos y técnicos pueden sustraerse a sus tamices en su ejecución.

Así es como las cuestiones ambientales expresan una postura que corresponde al interés particular del que lo plantea. El que presenta como diabólico el interés del opuesto es porque tiene una actitud favorable al otro planteamiento.

Por eso es que el que se relaciona con su entorno percibiendo que dio la vida a sus ancestros, hoy le da a él y así, de la misma manera,  espera dará la vida a sus descendientes, pone al agua y al origen de esa agua como lo fundamental.  Aquel que se relaciona con la naturaleza para conseguir de ella una mercancía, le interesa solamente la realización de esa mercancía sin importarle nada más, en la confianza de que mañana será otra la mercancía que llenará sus bolsillos de billetes. Otros entran a terciar y dicen: el oro y el agua.  Son los que aspiran les toque alguito cuando se realice la mercancía ambicionada y creyéndose iluminados para establecer la ruta del progreso de los pueblos, atropellan a los que quieren seguir viviendo del agua que estorba a los que quieren el oro, y a sabiendas de no tener razón ni justicia para trastornar la vida de numerosas personas, acuden a dirimentes supuestamente incorruptos, llamados técnicos, especialistas, doctos, para que, sin conocer a los que conviven con esas aguas, les indiquen que pueden vivir mejor sin ese líquido elemento.

¿Quién puede decir que no sirve un sistema de vida sino mora en esa comarca?  ¿Quién es aquel que por haber vestido con toga y birrete y trabajar con mandil blanco, máscara antigás y guantes de cirujano, pretende decir a miles de campesinos que no les conviene vivir en ese paisaje que les da alimento corporal y espiritual?

Son gentes para cuya “objetividad” de su criterio, emplean herramientas adquiridas para el buen cumplimiento de los fines de la sociedad en que viven, gentes que recibieron formación académica para aplicar herramientas fundamentalmente con fines de lucro.

Ellos no han percibido, no han visto en la historia de la ciencia y la técnica dominante en su grupo y adquirida en su academia,  que el objetivo de la investigación y aplicación de esa C.  y T., hasta hoy, es conseguir las herramientas para el encumbramiento de un sector de la sociedad, cada vez más minúsculo en los tiempos actuales. Por eso es que, manejando ese tipo de ciencia y tecnología, con toda naturalidad se ponen al servicio de minorías que atropellan a las mayorías justificando su acción en el uso de sus “modernas” C y T.   Alegremente dicen que lo artificial, el artificio, imitado, espurio, adulterado, simulado, postizo,  puede ser ejecutado, accionado, mejor que el trabajado en miles de años por las fuerzas de la naturaleza. Siguiendo a Aníbal Quijano, son gente que está conforme con el colonialismo supérstite en nuestra sociedad, son gente que agradecida le dice a los monopolios: “más me pegas, más te quiero”.

Los términos rimbombantes con que justifican su sometimiento al monopolio, al pueblo no le interesa.  El pueblo sólo sabe que ahí vive y que su descendencia también vivirá ahí si es que conjuga su acción con el accionar de las fuerzas naturales, haciendo una sinergia “que significa cooperación, concurso activo y concertado de varios órganos para realizar una función.” con“ la cualidad que tienen los sistemas de integrarse y potenciar sus capacidades conformando un nuevo objeto [que adquiere] nuevas propiedades que emergen de la dinámica natural de los sistemas … teniendo como resultado la maximización de las cualidades de cada uno de los elementos en interacción.“ (Joaquín Maruy: “El desarrollo de la oferta rural, La planificación del espacio  y la responsabilidad del ingeniero Agrícola”).

Este sumar energías, esta cooperación que beneficia a todos, no es percibido en la mayoría de las culturas “superiores” construidos por el animal más “inteligente, racional” del universo, el único que, aseguran sus leyendas, tiene base material, barro, en su origen. Recordemos que dicen que los otros animales fueron “creados” por “ciertas voluntades” ajenas a ellos.  Por eso es que hay personas que negando su pregonado supuesto origen fangoso, no alcanzan a comprender que otras culturas consideran que "la Tierra es un organismo vivo" y que en nuestras vidas “lo mágico se entremezclaba con lo natural en una amalgama indiferenciada.”, que las concepciones superviven mientras corresponden a su base material  y ésta no cambie, y no porque hayan recibido “el mejor homenaje que hace nuestro querido JM a esta identidad”.

Por supuesto que obras de infraestructura han sido construidas por nuestros compatriotas pre colombinos, pero, ojo, lo han hecho respetando la dinámica de los factores internos y externos, armonizando con los que hoy se conocen como los “stakehollders”, así tenemos a los andenes de Ollantaytambo, el canal de La Achirana en Ica, tambos para conservar alimentos; utilizando, más que herramientas físicas, sabiduría, comprensión de su hábitat y conjugando con él, por eso es que sirven hasta la actualidad.  Hay obras de infraestructura en nuestro país que se han hecho sólo por la ambición de los prestamistas extranjeros a quienes les seguimos debiendo hasta hoy por esas “ayudas”.  Ayudas que pese a tener que pagar todos los peruanos, benefician sólo a unos cuantos.  Ejemplo último, la irrigación de Olmos.