Un informe de la BBC sacó a la luz la historia de Mernoush, una niña cuyos padres, que nunca pudieron tener hijos varones, decidieron cambiarle de sexo y llamarlo ahora Mehran.
Según explica Aliza Fafhat, madre de la menor, la decisión de cambiarle de sexo a su hija fue por una cuestión de honor, pues según se cree en ese país, tener un hijo representa respeto y el seguro en el futuro de la continuidad del linaje dentro de las costumbres afganas.
Sin embargo, no todas las familias pueden ir en contra de la naturaleza, es por ello que aquellos padres que no pudieron tener un hijo varón han ido adoptando la costumbre de cambiarle de sexo a sus niñas. Una práctica que cada vez se hace más común en las diferentes clases sociales de Afganistán.