Humalismo imitando al Lulismo

Nuestros liberales al estilo peruano se han rasgado vestiduras no solo por la visita de Ollanta Humala al bolivariano Hugo Chávez, sino por el supuesto acercamiento de Petroperú a la estatal venezolana del petróleo PDVSA; horror han vociferado y hasta ya comienzan a especular con una y mil teorías conspirativas, lo afirmo convencido y con conocimiento de causa, allí no hay nada que leer, ni explícitamente ni entrelíneas, es exhibición mediática del más alto grado de pureza.

Me explico, el Humala de hoy ya lanzó los evangelios contestatarios por los suelos hace un buen tiempo, eso está claro clarito, como que Chávez según su propio decir es rojo rojito. Eso lo saben los círculos de poder en Lima y Caracas, lo que estamos expectando es una puesta en escena, donde todos ganan.

Ahondo un poco más, si aún no se vislumbra la veta, Humala necesita para su base social, hoy traicionada, un gesto que les devuelva alguito de fe, porque para algo no alcanza, que el Comandante es el mismo de antes, así que unas cuantas fotos de apretones de manos y abrazos, de esos que suenan hasta los huesos, con su homólogo de la tierra del joropo, vienen bien. Mientras tanto, el venezolano, que ya lo tiene bien identificado que el peruano, no es de los suyos; tampoco le cae mal unas instantáneas que hagan ver a los incautos, que todavía tiene control en la zona sur de Sudamérica, más allá de Evo Morales. Pero en el fondo, como dicen los gringos, allí hay tanto amor como el exhibido por Kim Khardasian en su efímero matrimonio.

Pero además como no hay encuentro presidencial sin firmar algo, sobre todo aquellos rimbombantes documentos llamados: acuerdo marco, donde la única cosa clara es que no se comprometen a nada, con una prolija redacción. Los venezolanos rubricarán intenciones de hacer de todo en petróleo y gas en el Perú, pero al final no se realizará nada, como han resultado compromisos similares suscritos con todos los países de la región. Lo que si ellos cuidan bien de sus temas petroleros son dos cosas: vender periódicamente al mercado americano, allí hay un matrimonio de conveniencias recíprocas, que a ninguno de los dos les conviene el divorcio y cumplir con los países del Comunidad del Caribe, que son casi la mitad de los votos en la OEA, el resto no importa.

Así que para los nerviosos, tranquilidad, una sesión de fotos no le hace daño a nadie. El Humalismo está jugueteando el Lulismo style, izquierdismo fotográfico y liberalismo para gobernar.