El corresponsal de France 2, Gilles Jacquier fue asesinado ayer en Homs, mientras cubría la violencia desatada por el régimen de Al Assad.
Sin embargo no fue el único. El camarógrafo, Christophe Kenck, también salió herido del ataque con granada. Los dos tenían un visado para trabajar en Homs.
Los medios internacionales también revelaron que en el ataque, otras siete personas perdieron la vida, aunque aun no se conocen los detalles del drama.