El príncipe Guillermo está actualmente completando su entrenamiento como piloto de rescate en las Islas Malvinas, y allí estará hasta dentro de seis semanas. Es por esa razón por la que la joven Catalina ha decidido dejar Gales y trasladarse a la capital británica, donde estará hasta que su marido vuelva.
Entre la rutina diaria de la duquesa de Cambridge está el ir a su salón de belleza favorito, Richard Ward, en el exclusivo barrio de Chelsea. En el local se pone a punto para posteriormente visitar diversas tiendas.
Pero Catalina no está del todo sola. Su mejor compañía es su nuevo miembro familiar, un cachorro cocker spaniel que les regaló una amiga de su madre, Carole Middleton, según publica bangshowbiz.com.
"Pertenece a una camada de cocker spaniel de una de las amigas de Carole. Al principio se lo llevaron a casa por un periodo corto de tiempo para ver cómo se adaptaba pero Guillermo y Catalina se enamoraron al instante del cachorro y no mucho después decidieron quedarse con él", contó una fuente.