Las autoridades de Filipinas confirmaron que aumentó a 63 el número de muertos tras el terremoto de 6.7 grados de magnitud en la escala de Richter que sacudió el lunes a la isla de Negros.
De esta manera, los equipos de rescate continúan con las labores para ubicar a 29 personas enterradas en el pueblo de Guihulngan
Cabe indicar que tanto el ejército como el alcalde de la localidad, Ernesto Reyes, descartaron que los sepultados permanezcan con vida.
Además, se van desvaneciendo las esperanzas de encontrar con vida a alguna de las 42 personas que fueron enterradas por una montaña de tierra y escombros por otro alud ocurrido en el pueblo de La Libertad.
Finalmente, más de 74 mil personas se vieron afectadas por el sismo, que dejó diez puentes inutiliados y tres tramos de carretera, además de haber destruido 974 casas por completo.
El terremoto de 6.7 grados se ubicó a 19 kilómetros de profundidad y 70 kilómetros al norte de Dumaguete, según los datos del Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS).