¿Jinetes del Apocalipsis o Troika?

Las protestas sociales que experimentan simultáneamente: Grecia, Portugal, Italia y España; por los ajustes en las políticas económicas que sus gobiernos asumen ante la presión de los financistas mundiales, nadie sabe aún en que terminarán, pues la interrogante es: ¿será posible implementarlas en el terreno de los hechos?

Para los ajustadores, el raciocinio solo cubre el aspecto cuantitativo, no toman en cuenta que todo lo recomendado pasa por persuadir o pasar por encima de los opositores políticos, esa es la tarea que le encomiendan  a los jefes de gobierno.

Los comentaristas económicos han llamado “troika” a los celadores de los intereses de los prestamistas: Unión Europea, Banco Central Europeo y Fondo Monetario Internacional. Pienso que más bien que son los jinetes del apocalipsis-aclaro que solo lo digo en sentido figurado, pues estoy lejos de una conversión religiosa fanática-solo con la ausencia del que conduce el caballo color bayo, que represente la muerte, pues no es de su conveniencia que ella  se produzca.

Siguiendo la cita bíblica, la famosa “troika” tiene su correspondencia, con los jinetes de los caballos color blanco, rojo y negro, sin que ninguna de las tres instituciones puedas ser identificada con algunos de ellos en particular, el concepto es intercambiable y aplicable por igual a cualquiera “troiko”.

El corcel blanco, que representa la victoria, es el fin que aspiran, que consiste en que las cuentas se saneen, el consumo crezca y los financistas sigan con su ciclo normal de préstamos con el máximo rédito posible.

El caballo rojo, que es la guerra, será la puja inevitable con los opositores a las medidas recomendadas, lo que se traducirá en enfrentamientos que ya están ocurriendo.

El caballo negro que es el hambre, en estos casos será textual. Las medidas que se están tomando no solo llevarán  a la reducción del consumo sino la desaparición de él para muchas personas.

Con las fichas puestas en el tablero, todo parece reducirse a la dicotomía: aceptas o mueres. Este raciocinio es el facilismo del establishment, Néstor Kirchner les demostró que la irreverencia pueda dar resultados, esa es la tercera vía, lo que no significa que todo fue agua de malvas en la  Argentina, es una alternativa válida.