La empresa de energía nuclear Kansai Electric Power (KEPCO) decidió hoy detener la unidad número 3 de su central atómica en Takahama para efectuar las revisiones regulares en caso de una eventual catastrofe como la ocurrida el año pasado en la ciudad de Fukushima.
Según los medios japoneses, la desactivasión de esta unidad de fisión ha dejado al país del sol naciente con solo dos de sus reactores operativos. Asimismo, este hecho ha generado la incognita sobre si dichas unidades operativas se darán a basto para brindar energía a todo el territorio.
De igual manera, el Gobierno japonés desde hace un año prevé la implementación masiva de centrales termoeléctricas para que no surja una crisis energética.
Luego de la tragedia ocurrida en Fukushima, el gobierno nipón decreto el recorte de consumo de energía a nivel nacional en un 10% para evitar alguna eventual escasez de suministros energéticos.