El Comando "Solo Valdés Salvará al Perú"

Desde el retiro del gobierno militar en los años 80, pocas veces, para no decir nunca y no pecar de impreciso, se había visto a la derecha peruana en pleno con aparato mediático incluido, hacer una defensa tan cerrada de un Primer Ministro, como lo han hecho en las últimas dos semanas, con el discreto personaje que es Oscar Valdés.

Han editorializado en simultáneo, sin desafinar, émulos del coro de villancicos “Los Toribianitos”. Y como dicen los cánticos de los niños en las escuelas, como veían que resistían, fueron a llamar a otro vocero más, hasta uno de peso pesado en sentido textual y valorativo, como el caso del ex Presidente Alan García, se sumó. Una larga cadena de apoyo, en contra de los “rojos  conspiradores” que atentaban contra el brillante Premier, elevado a la categoría de garante del modelo económico, ante una dupla Humala-Heredia, que aún no merece su confianza plena.

¿Cuál es el encanto que tiene, para haber calado tan profundo en los afectos de los capitostes de los poderes fácticos y gonfaloneros? ¿Intelecto a raudales? ¿Oficio político indiscutible? ¿Experiencia en la gestión? ¿Conocimiento excelso de doctrina económica? ¿Visión de estadista? Por supuesto que ninguna de las virtudes reseñadas forma parte de su “background”. Gusta porque habla fuerte y directo, no importa las torpezas, da la impresión que les va sacar Conga adelante a punta de balas de goma, gases de todos los olores y plomo si es necesario. Esa es su virtud. Y como en el pensar elemental de los grupos de poder económico, el santo y seña es: “Conga o muerte venceremos”, allí hacen la apuesta de su vida.

Sus torpes declaraciones sobre la Comisión de la Verdad, que puede ser todo lo discutible que quieran, pero al decir que hubo teatralización, fue ofensivo y sumó un demérito más para la izquierda, que ya lo veía con malos ojos, por su comportamiento cuartelario, llevó a que hicieran campaña para echarlo, están en su derecho, así es la democracia.  Allí la derecha piensa que si es relevado, no habrá otro con el perfil de mandar la soldadesca encima cuando los actores sociales en Cajamarca, sigan oponiéndose a su proyecto minero. Ese es el tema.

Así de elementales nos hemos vuelto en la política; que lejos del conocedor de la economía y polemista Manuel Ulloa, hoy criticado por su ex hijastra, Isabel Sartorius,  por un tema personal; del erudito Luis Alberto Sánchez; del polémico y culto Javier Valle Riestra; del defensor de las causas imposibles, pero de mucho oficio Carlos Ferrero; del entretenido y siempre fresh para la polémica, Pedro Pablo Kuczynski y de las dotes de operador político de Jorge del Castillo. No podemos ser apologistas de la involución por conveniencia.

Pero los defensores, no reparan que para sus fines ni siquiera les sirve. La selección de los peritos, que pretenden que les de legitimidad a sus discutibles actividades mineras, tiene vicio de origen. En un tema tan discutible, que la selección en secreto no se puede practicar y menos si son personas naturales, por más que se les pretende presentar como parte de una corte de sabios. Aquí debió irse por seleccionar a instituciones y en un proceso público, se pudo haber hecho bien y en tiempo record, pero la impericia y la creencia que el estado se maneja como la cuadra de un cuartel, lo llevo a tamaña barbaridad.

Que no se sorprendan los corifeos que los consejeros de los mineros que tienen olfato de sabueso, se dé más de uno que ya olió a peligro, recomienden en las próximas semanas soltarlo ante las hordas caudinas. El mismo Humala ha sido esquivo en darle respaldo explícito y el buen Presidente Consejo de Ministros ha tenido que forzar una foto con la poderosa señora Heredia, para que sus amigos tituleros, rotulen. “espaldarazo”. Moneda más feble la que se han comprado, ya verán.