Viernes 26 de abril 2024 | Contáctenos
Aunque para los creyentes católicos estamos en plena cuaresma, tiempo que se supone es de preparación y reflexión previa a la Semana Santa, en Cerro de Pasco, la ciudad más alta del Perú y el mundo, aun se vive el carnaval, festividad que cada año convoca la participación masiva de autoridades, empresarios y pobladores quienes organizan una impresionante comparsa donde se lucen los trajes mas extravagantes y vistosos, para celebrar la entrada triunfal del Rey Momo.
A pesar del intenso frío y la lluvia que remojó las calles de la ciudad minera, miles de pasqueños provistos de paraguas y ponchos plásticos, también se contagiaron de la alegoría carnavalesca y lanzaron globos con agua, serpentinas, harina y pica pica a todos los transeúntes.
La fiesta del CXXXII Carnaval Cerreño comenzó desde muy temprano, con el acondicionamiento de los vehículos alegóricos. El Gobierno Regional Pasco y sus distintas direcciones como Comercio Exterior y Turismo (Dircetur), Energía y Minas, Producción y Salud, presentaron coloridas delegaciones, algunas de ella a lomo de caballo, cantando las mulizas y huaynos con letras picarescas, tan tradicionales en estas fiestas.
Un poco de historia
El carnaval cerreño es una de las tradiciones que ha dado la vuelta al mundo por su deslumbrante presentación de comparsas carnavalescas, las mismas que tuvieron su origen en la ciudad de Yanacancha, Provincia de Pasco, región de Pasco.
Según las tradiciones pasqueñas el primer Club Carnavalesco se fundó en 1880 con el nombre de Calixto y duró hasta el año 1912. Su nombre se dio en homenaje al español Don Calixto de la Gascuña, dueño de la hacienda minera de Huarmipuquio y al que se le consideraba como creador del carnaval. Por tanto, las diversas comparsas carnavalescas tomaron el nombre de “Calixtrada”.
Desde entonces los pasqueños, por lo general empleados y obreros en las minas, realizaban sus preparativos con muchísima anticipación y fue así como se fueron creando los clubes carnavalescos: “Don Calixto”, “Don Vulcano”, el aristocrático “Cayena”, “Don Apolo”, “La Lira Cerrreña” y el “Tahuantinsuyo“, entre quienes siempre existirá una competencia por demostrar cuál es la mejor comparsa. Hoy la competencia convoca también a autoridades y representantes de instituciones públicas y privadas.
Resistencia cultural
132 años después la tradición carnavalesca en la ciudad más alta del Perú ha resistido al paso del tiempo. Ni la explotación minera que ha carcomido parte de la ciudad, ni el intenso frío que a veces bordea los 10 grados bajo cero, le ha borrado la sonrisa a este pueblo que también tiene el derecho de disfrutar, como todos los peruanos, de la alegría del carnaval.
Como todas estas fiestas, el desenfreno que se ha desatado ayer en Cerro de Pasco, culminará este miércoles con la muerte y entierro del Rey Momo. Hasta entonces, en la ciudad más alta del mundo, la vida es un carnaval.
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