Putin vuelve y revuelve

Aunque la Rusia de hoy ya no tiene el poder de la gigantesca y extinta URSS, cada año que pasa pisa más fuerte en el escenario global, intenta poner condiciones, perturba acuerdos de seguridad internacional. Guarda sus impulsos imperiales, en suma, y tiene en Vladimir Putin al "hombre fuerte" que capitanea esa cruzada por un retorno con gloria.

El líder de Rusia Unida ha ganado las elecciones, con más del 63% de los votos, luego de tomarse unas "vacaciones" en el cargo de Primer Ministro, desde donde no dejó de mover los hilos más fuertes en el Krem-lin. Sumados los 6 años que ahora se vienen, concentrará el Poder real por 16 años, contando desde el 2000, cuando fue elegido por primera vez.

Es posible que vuelva a lanzarse el 2018 (el período presidencial en Rusia dura ahora 6 años), con lo que podríamos tener Putin hasta el 2024, algo que debe despertar la envidia del presidente-paciente-candidato Hugo Chávez y que alienta reminiscencias zaristas y soviéticas. Nadie, en el voluminoso país, parece hacerle grandes cosquillas políticas.

O parecía. A pesar de que el ex miembro de la KGB, convertido en astuto mandamás, muestra tener viento a favor, en los últimos años ya ha surgido una importante corriente, clasemediera en su mayoría, que le ha salido al frente, harta de sus ucases. Se le reclama, especialmente, su silencio frente a la corrupción, que alcanzaría fantásticas proporciones.

En el plano exterior, Putin no es precisamente un suave trago de vodka para las potencias occidentales. Si ya con Dimitri Medvédev en la presidencia, asuntos como las condenas a Irán, por su perfidia nuclear, o a Siria, por las masacres contra las fuerzas opositoras, se bloquearon, con él es posible que la línea se torne aún más dura contra esas iniciativas.

Rusia tiene cómo darse esos lujos: tiene las más grandes reservas energéticas del mundo (especialmente de gas natural), forma parte del comando BRICS (Brasil, Rusia, India, China, Sudáfrica), tiene una economía fuerte y es uno de los cinco grandes del Consejo de Seguridad de la ONU. Por si fuera poco, es un enorme proveedor global de armas.

Con Putin nuevamente al frente de todo, esos factores se potenciarán y serán puestos al servicio de una mayor recuperación imperial, en un momento en el que Europa tambalea y Estados Unidos anda un tanto medroso en el plano exterior. La escena contemporánea, entonces, promete tornarse más controvertida y entretenida con este regreso triunfal.

El artículo de opinión fue publicado en La República.