Nicolás Yerovi es un poeta, periodista, dramaturgo, novelista y humorista peruano que gracias a su fino y desvergonazdo humor a logrado tener mucha simpatía entre sus seguidores. Esta entrevista fue realizada en el 2000 por la página CircoVip.
Titina es el personaje de una de las poesías de su abuelo…
Así es, esta obra es una historia de amor inspirada en el poema “Mandolina” que mi abuelo escribió hace más de cien años. El poema cuenta la historia de un joven que va a darle serenata a una muchacha llamada Titina y exclama “Titina, tina tontina, la de la voz argentina y el aliento de jazmín, sal a tu ventana, ingrata, y oye la mandolinata que te doy desde el jardín”.
Es uno de sus poemas más conocidos…
Claro, ahora lo enseñan en todas las secundarias, yo me he inspirado en el poema y además he aprovechado para musicalizarlos con mandolina y guitarra, y se ha convertido en la canción de la obra, nos ha quedado muy bien.
A diferencia de sus obras anteriores, Titina tiene características muy peculiares…
Es mi vigésimo cuarta obra teatral, la única que he escrito en verso, y en los últimos 85 años es la única obra teatral que se ha escrito en verso octosílabo y consonante. Otra particularidad es que se representa en horario diurno y la representamos al aire libre, es decir, en lugar de llevar el escenario al teatro, llevamos a los actores a escenarios reales.
Extraordinarios escenarios barranquinos…
Inmejorables, lo curioso de la obra es que aparenta ser un recorrido turístico por los lugares más simbólicos de Barranco pero en cada uno de ellos, además de enterarte de todo lo referente al puente de los suspiros, La ermita, o la plazuela de San Francisco, pronto surgen estampas de antaño y seres de principios del siglo pasado que urden toda una trama amorosa, es un gran espectáculo.
Además, hay que decirlo, es el único montaje teatral del mundo que incluye el almuerzo…
Así es, la última escena de la obra se realiza en una casona, ahí todos los asistentes pueden compartir con los actores platos criollos de hace 100 años. Todos comemos la carapulcra, el cau cau, la sangrecita que comían nuestros abuelos. Es un espectáculo que no tiene precedentes y, además, no creo que tenga sucedentes.
¿Cómo llamarle a este tipo de teatro?
Ya que no encontramos un nombre para esta aventura sumamente particular, lo hemos denominado “el espectáculo más singular del mundo”, y lo es porque no hay nada que se compare.
Hablemos de usted, ¿cómo se inicia su vocación de poeta y dramaturgo?
La verdad yo mismo no tengo una idea clara del por qué he dedicado mi vida a escribir. Podría decir que ha sido por descarte, ya que no sirvo para nada más. Soy un burro para todo lo que no sea escribir, hacer versos o reírme de la vida siendo como soy, peruano. Para mi esta es única manera de no enloquecer.
¿Cómo influyeron su padre y su abuelo en su vocación?
Más que influencia se trata de lo innegable, ¿qué puede hacer que yo sea parte de una tercera generación de poetas y escritores que se han dedicado a satirizar su vida, su suerte y a los personajes que gobiernan nuestra historia?, eso es genético, no encuentro otra explicación. Me he dedicado a reír porque llorar es muy feo.
¿Por qué dejó "Monos y Monadas"?
Hace 103 años que mi abuelo fundó la revista y yo la conduje hasta el 2003 cuando, por motivos de salud, el doctor me dijo que tenía que dejar de hacer el semanario porque de lo contrario dejaría de hacer todo. Tuve que retirarme por un tiempo del periodismo hasta hace unos años cuando volví con la radiografía de Perú 21, llevo más de 2 mil radiografías, donde trato con suma amabilidad las ocurrencias de la vida cotidiana y a los personajes que las causan, esta debe ser la única columna escrita en verso en todo el mundo.
Un trabajo maravilloso…
Si existe un trabajo que alegra la vida es el trabajo que yo elegí para vivir. Dicho sea de paso, es un privilegio haberme pasado la vida, desde los 19 años, viviendo de escribir y publicar únicamente lo que se me ha ocurrido.
¿Cómo definiría su humor?
Es algo que me permite desconcertar a la gente para que no se enteren que soy un alma sensible y un poeta lírico pero tímido. Yo me escondo detrás del antifaz del humor porque soy sumamente frágil, soy un ser candoroso.
Para terminar, ¿qué personaje político le parece más cómico?
La competencia es tan ardua que sería injusto señalar a uno.
¿Una terna?
Dependería del día, depende de la barbaridad cometida. Hay quien logra un rol estelar por el despropósito del lunes y otro por hacer la competencia dice una barbaridad el martes. Por otro lado, yo nunca he atacado a nadie en mis columnas, soy un incomprendido, cuando dicen que ataco me siento leído con segundas intenciones.