Frente a las condiciones que puso Doe Run Perú (DRP) al Estado Peruano para volver a operar el Complejo Metalúrgico de La Oroya –según la segunda versión del plan de reestructuración- el ex viceministro del Ministerio del Ambiente, José De Echave señaló que Doe Run viene utilizando una estrategia de presión y chantaje abierto al Estado peruano, la cual es inaceptable para una empresa que por más de quince años no ha cumplido con la construcción de la planta de ácido sulfúrico, como parte de su Plan de Adecuación y Manejo Ambiental (PAMA)”, así lo señaló el especialista y uno de los voceros de la Plataforma La Oroya por un cambio.
De Echave sostiene que la nueva exigencia de Doe Run Perú para que el Estado peruano asuma el costo de la demanda interpuesta en la Corte de Missouri (EE.UU) por los afectados de la contaminación en La Oroya contra Renco, no es más que una nueva maniobra de esta cuestionada empresa para evadir sus obligaciones ambientales con la población de La Oroya.
Indicó que a medida que se ha avanzando en el caso, los argumentos mostrados por Doe Run muestran el verdadero tipo de empresa que es, al que no le interesa los altos niveles de contaminación registrados en esa ciudad sino sólo aumentar sus ingresos sin velar por el medio ambiente ni por la salud de la población. “La presencia de Doe Run perjudica el futuro de La Oroya, por más de quince años no ha cumplido, y nada garantiza que ahora sí lo hará”, sostiene De Echave.
Con respecto a la iniciativa legislativa presentada por la Bancada Nacionalista, que fue aprobada en la Comisión de Energía y Minas del Congreso de la República, y que en los próximos días, se decidirá en el Congreso de la República si se le amplía por 30 meses a Doe Run Perú el plazo para que cumpla con sus compromisos ambientales. De Echave advierte que sí el Parlamento aprueba este nuevo plazo, el reinicio de operaciones sólo sería viable mientras la Junta de Acreedores apruebe el Plan de Restructuración, el cual debe definirse a más tardar el próximo 12 de abril.
“El Congreso le da el marco legal, pero la que finalmente la define si vuelve a funcionar o no es el Plan de reestructuración, la cual señala el financiamiento, plazos, responsables y compromisos a cumplirse según un cronograma”, explico.
Para el ex viceministro del Ministerio del Ambiente, De Echave, hay muchas dudas de que la empresa vaya a cumplir con sus obligaciones ambientales, postergadas hace más de una década. “Si hoy pretende chantajear al Estado más adelante utilizará nuevas maniobras que la liberen de responsabilidad y no cumplan con la salud de la población. Necesitamos autoridades ambientales más fuertes contra este tipo de empresas”, finalizó De Echave.
Datos:
El 27 de marzo del presente año venció el plazo de la segunda ampliación del PAMA de Doe Run Perú, dicho compromiso ambiental fue asumido en 1997.
El pasado jueves 29 de abril, DRP presentó su plan de reestructuración ante la Comisión de Procedimientos Concursales de Indecopi, el cual ha sido severamente cuestionado, ya que exige al Estado que se encargue del proceso judicial interpuestas contra Renco ante la Corte de Missouri (EE.UU.) por los afectados de la contaminación en La Oroya.
En el Plan de Reestructuración de DRP, se señala que el inicio de las operaciones será a fines de junio, y no el 1 de mayo, como lo señaló en diversos comunicados públicos la empresa (Con información del blog La Oroya por un cambio).