La Constitución de 1979 fue el colofón jurídico-político de una nación que había padecido 12 años de autoritarismo, pero no de los militares, sino el autoritarismo inspirado por el socialismo.
La autoría ideológica de la Constitución de 1979 fue producto del cabildeo de tres bloques ideológicos: 39% socialdemócrata, 32% marxista-leninista y 29% demo-liberal. El resultado fue un texto “socialistón” que impedía la des-estatización de la economía, la defensa de la Nación contra la agresión guerrillera-terrorista de los comunistas y la des-burocratización del Estado.
La Constitución de 1979 tuvo casi 12 años de vigencia. El promedio de vigencia análisis histórico constitucional peruano, señala en 10 años el promedio de vigencia de nuestras cartas fundamentales. La de 1979 se mantuvo dentro de dicho promedio.
La de más larga vigencia ha sido la Constitución de 1860, cuya asamblea fue presidida por Bartolomé Herrera, sacerdote, Patrono de la Educación Peruana y posterior Obispo en Arequipa. Es la constitución que rigió para el cambio de siglo hasta 1919. Tuvo períodos de interrupción como el breve retorno revolucionario de inspiración liberal de 1867 y la guerra con Chile de 1879, pero renació con vigor por casi 60 años. En contraste, la de más breve vigencia fue la Constitución de 1826, promulgada por Bolívar, a la que insensatamente denominó la “Vitalicia” pero que ni siquiera llegó a tener dos meses de vigencia.