¿Los dueños de Repsol?

La importancia que la Economía de Mercado (EM) da a la “propiedad segura” no la origina el sensible derecho de propiedad que sienten algunos sino el que,  sin “propiedad segura”, no pueda existir democracia ni desarrollo. No puede existir democracia porque, si el  Estado puede disponer de la propiedad de los ciudadanos, la única forma que se tiene para defender la de uno es someterse a quienes gobiernan.

Sin “propiedad segura” no existe desarrollo porque sin ella los activos del país pierden su capacidad de servir como colaterales para préstamos, lo que convierte al Estado en el único financiador. Cuando no existe “propiedad segura” lo primero que escasea son los bienes y servicios que requieren inversiones que el Estado no tiene dinero para financiar. Hay casos en que con su aval, un Estado que no respeta la “propiedad segura”, puede obtener préstamos en el extranjero pero saliéndose del ámbito de la EM para entrar en el del “QUIEN PUEDE, PUEDE”, sistema que permite a las empresas de países poderosos, apoyadas por su país, aplicar medidas de fuerza, como embargos (en USA embargo es romper relaciones comerciales) si no se les paga.

Es probable que Venezuela, con aval del Estado, haya obtenido préstamos de empresas norteamericanas, porque si no los paga, la embargan impidiéndole refinar el petróleo pesado que produce. Casi todas, si no todas, las refinerías capaces de procesar el petróleo pesado venezolano están en los EEUU. “El que puede, puede” aunque protesten los caviares. Ellos son peligrosos porque dañando a su país, viven de sus protestas como lo hacen nuestros caviares embajadores en Argentina y Uruguay, quienes, para seguir percibiendo $ 150,000 al año, han tirado por la borda ideales que ellos califican como de “izquierda” cuando son privilegios mercantilistas.

Argentina, expropiando Repsol, ha dejado el ámbito de la EM para ingresar al “QUIEN PUEDE,  PUEDE”. Veamos quién puede más, Argentina con todos su caviares o los intereses petroleros del mundo. Pagando lo que vale, Argentina puede expropiar Repsol, pero si tiene el dinero para hacerlo  ¿Por qué no crea otro Repsol?  Más aun, si tiene el dinero para expropiar Repsol,  debe evaluar si es conveniente que un Estado ineficiente administre las inversiones petroleras de su país. Muchos empresarios defienden, sin usar los argumentos que brinda la EM, a Repsol pero permanecen en silencio en casos como el de la Ley 29299, Protección Patrimonial, que al permitir que los complejos azucareros Pomalca, Tumán, Cayaltí y ahora Casa Grande, no paguen lo que deben, en el fondo están confiscando, a favor de unas empresas privadas, las acreencias de comerciantes pequeños y medianos  así como la de algunos ex servidores. Mejor, dejémoslo allí (Con información del diario Expreso).