En América Latina existen muchas maneras para saber explotar los recursos naturales de cada país y no depender del mercado asiático, que día a día nos abruma cada vez más.
Por lo tanto, deben defenderse las industrias donde se encuentran más protegidas que incluyen el procesamiento de materias primas como el acero y los plásticos. Por ello, la inversión debe estar enfocada en otros sectores.
Asimismo, los recursos y esfuerzos deben ser dirigidos al desarrollo de capital humano, al área de los servicios que tengan referencia al mercado internacional y las infraestructuras. De igual modo, no debemos olvidarnos de los fondos de inversión como las cajas de ahorro para la estabilización macroeconómica o para futuras generaciones.
Respecto a la economía Latinoamericana, se tiene mucho camino por recorrer, pese a ser una región con un mayor grado de desigualdad social a nivel mundial. En conclusión, el crecimiento desde abajo es fundamental.
Artículo publicado en El Universal de Venezuela el 10 de mayo del 2012.