Pero resulta obvio que ni las FF AA, ni la PNP pueden cumplir con su misión, cuando el Estado representado y administrado por el gobierno de turno, -como ha ocurrido especialmente con los gobiernos de Paniagua, Toledo y García- decide ignorar irresponsablemente las necesidades de las instituciones castrenses y policiales, cuya solución resulta fundamental para el cumplimiento de su misión constitucional, maltratándolas presupuestariamente, como de alguna manera lo admite el citado columnista. De esta forma se ha hecho evidente la poca importancia que se le asigna a la defensa nacional.
Por ello resulta inaceptable que se pueda pensar siquiera en responsabilizar a las FF AA y la PNP en forma exclusiva de lo que viene ocurriendo respecto de la lucha armada contra el narcoterrorismo cuando han sido nuestros sucesivos gobiernos los directamente responsables de la situación actual de las fuerzas del orden, tanto en el aspecto operativo como de personal, que difícilmente puede ser peor.
Publicado el 25 de mayo de 2012 en el diario La Razón.