La crisis en Europa ha ayudado a modificar en la población ibérica el sentido de la democracia. Asimismo, ello conlleva a que los partidos políticos y la clase del mismo rubro cambien su visión al respecto.
Por su parte, Thomas Friedman, por medio de un artículo publicado recientemente afirma que anteriormente la política respecto a la democracia brindaba servicios beneficios sociales e infraestructuras a las personas de todos los estatus sociales.
El estado del desarrollo del bienestar se sumó a la democracia. Asimismo, cabe indicar que en dicho aspecto España estaba más atrasada que los demás países europeos.
Respecto a las relaciones laborales, éstas desequilibraron el poder gracias a la última reforma laboral que logra el avanza hacia la flexiseguridad.