Se alza con desparpajo por encima de viejos edificios que son reducidos a acompañar la obra faraónica. El antiguo Panteón Nacional, quedará sin su principal huésped histórico, quien irá con su nuevo rostro, tan parecido a un beduino, a parar hasta a la estructura que mandó a construir el presidente megalómano, es su empeño de fundirse en los mismos huesos de aquél que profanaron en hierático show de televisión. Como un armatoste blanco que arrebata miradas y guarda oscuros intereses, se presenta la última ocurrencia presidencial, para tratar de secuestrar la gesta heroica del Libertador Simón Bolívar.
La osadía arquitectónica se ha engullido una inmensa cantidad de millones de dólares, los cuales justifican bajo el frondoso árbol del patriotismo mal entendido. Han ultimado detalles y guardan el secreto con el celo de los regímenes totalitarios. Si nos asomamos a la historia encontraremos muchísimos ejemplos de personajes que creyeron que ellos eran los predestinados, y que su obra tenía que ser resguardada del olvido; se hicieron construir obras espectaculares que sirvieran de custodio de muchos que se sentían dioses. En Venezuela Hugo Chávez quiere abrogarse el título de Libertador de la República. Se cree la patria y hasta autoriza una cuña en donde un venezolano humilde trata de ponerlo a la altura de Dios y por encima de los titanes de la independencia. Su egolatría y su desvío de la realidad han hecho estragos en su alma atormentada.
Manos perversas osaron tocar los huesos sagrados de Simón Bolívar, buscaban algún sortilegio que uniera al Padre de La Patria, con la pesadilla que tenemos como gobernante. Su indignidad mancilló la osamenta del caraqueño para hacerla instrumento de la perversidad de este régimen inmoral y putrefacto. Ahora organizaron un espectáculo para presentarnos al héroe con un rostro renovado, profundizaron sus rasgos negroides para quitarle el centelleo mantuano, cómo si cambiando facciones pueden ocultar su origen en cuna de oro. Después de tanto maquillaje institucional, se descubrió que el nuevo rostro era un vulgar plagio de una revista merideña que data del año ochenta y seis. ¿Cuánto dinero gastaron en un estudio científico, que al parecer, solo les costó encontrar una vieja revista de donde se robaron el trabajo de otros? Es la característica fundamental del chavismo: la trampa como recurso para engatusar mentes fermentadas por el fanatismo político.
Igualmente, es el interés de los regímenes populistas de simbiosis revolucionaria, creerse que ellos tienen la potestad de mancillarlo todo. En el año 2004 aparecieron en la provincia de Río Negro en la Argentina unas pinturas del héroe José de San Martín con la fisonomía de Néstor Kirchner, aquello nunca se aclaró. Era el deseo de cruzar la línea de tiempo para licuar ambos personajes y transmitirle al pueblo la sensación de su origen místico. Aquí solo les faltó colocarle la verruga al beduino.
La leyenda negra los cubrió de miedo ante tantas desgracias. Han muerto dirigentes claves de la revolución desde que montaron el show con los restos de Bolívar. Otros batallan por no entrar en esa lista elaborada por la casualidad. (El Universal)
El mausoleo apartará al Padre de La Patria de otros baluartes de la venezolanidad, y lo dejará solo para que únicamente el presidente Hugo Chávez tenga la posibilidad de estar con él. El sueño del primer mandatario nacional es fundirse con Bolívar en una especie de transmutación de los tiempos, si el cáncer lo termina venciendo el mausoleo será su casa; este es el verdadero interés que tiene como sueño postrero. Es su monumento de ensueño que anhela le sirva de encuentro con los fantasmas. Quiere que su liderazgo siga viviendo más allá de la muerte física. Cree que construyendo este mausoleo la gente lo recordará y hasta lo comiencen a llamar el verdadero Bolívar. ¡Cosas de chiflados...!