Sábado 27 de abril 2024 | Contáctenos
Es recurrente que en el Perú se mencione la necesidad de inversión en infraestructura, las cifras son billonarias, la cuantía depende de los proyectos que se incluyen como indispensables. El presidente Humala, en su mensaje a la nación de fines de julio, ha hecho referencia que se hará construcciones por 10 billones de dólares.
Es importante entender el esquema que tiene el estado para este tipo de obras. La preferencia es el otorgamiento de una concesión, derecho que se obtiene en un proceso de competencia, donde el interesado se compromete a construir con sus recursos, debiendo recuperar lo invertido con su respectiva utilidad, mediante el cobro del servicio prestado a los usuarios. En caso la demanda sea insuficiente se otorga un flujo de pago a partir de fondos públicos.
Las dificultades que se presentan hoy en día para realizar las obras son de dos tipos: demanda muy baja, lo que obliga al estado a garantizar un flujo económico de suma considerable y falta de eficiencia en la organización de los concursos de parte de la agencia Proinversión. Esto conlleva a que se tenga períodos de espera largos, desde el anuncio hasta que se selecciona un ganador.
El pronóstico de ejecutar 10 billones de dólares, es demasiado ambicioso para la manera como se maneja el estado hoy en día. Lo más probable es que se pueda otorgar algunas carreteras y cerca de 300 KM de ducto para gas natural, es lo que realmente puede ocurrir.
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