La globalización como lo he expresado en oportunidades anteriores es un proceso y tendencia de difusión de ideas, valores, formas de producción y de comercio, procesos y productos, diseños organizativos y formas de conducta, a través de las fronteras nacionales. Es decir, flujos transfronterizos de bienes, servicios y capitales. Un proceso y tendencia dinámica, por lo tanto, que está conduciendo a una creciente articulación e interdependencia de todas las sociedades. Los servicios y los eventos deportivos son una manifestación de ella y la globalización se expresa en una forma interesante, cuando se realizan eventos de alto nivel competitivo.
En ese sentido, la dimensión deportiva de la globalización se ve en toda su extensión en los recién finalizados Juegos Olímpicos de Londres, con todo el éxito para el país anfrintión, en donde reside el desarrollo acelerado de un complejo deportivo comunicacional de dimensión transnacional que tiene alguna de estas características: establece parámetros globales de competición y excelencia entre individuos, crea modelos de roles (héroes deportivos), crea eventos que son sintonizados simúltanemante por proporciones altas de la población mundial, entre un 10% y 30% de la población mundial como las Olimpiadas o los Mundiales de Fútbol, los cuales movilizan amplios recursos financieros y, en términos de la producción de equipamiento deportivo y marketing de productos mundializados, produce una elite de ciudadanos deportivos con gran movilidad de nacionalidades que se encuentran en estos eventos mundiales del deporte.
Veamos algunas cifras que dejan estos juegos: 14 mil seiscientos millones de dólares costaron las instalaciones deportivas, 1 millón de artículos deportivos se utilizaron durante los juegos, 2 millones de visitantes se calcula que llegaron a Londres en los juegos que finalizaron el pasado 12 de agosto; lo que ello significa para la industria del turismo, que es otra industria de servicios beneficiadas por las olimpiadas, 11 millones de entradas fueron emitidas para los juegos Olímpicos y Paralímpicos, de las cuales el 75% se vendió en el Reino Unido, 10 mil cuatrocientos noventa deportistas disputaron 302 pruebas en 26 disciplinas.
Olímpicas, y 204 naciones recibieron la señal de satélite de Londres y se calcula fue más de 1.000 millones de personas vieron por televisión la ceremonia de clausura y de las 10 principales potencias deportivas, 5, son de Europa, Estados Unidos y dos del continente asiático: China y Corea del Sur. Uno de Oceanía: Australia y Rusia, que comparte una división geográfica con Europa y Asía. Dejo a los amigos lectores, la sumatoria de medallas para ver el abismo que se presenta entre esos países y otras regiones del mundo. Para Río 2016, los países de latinoamérica tienen un gran reto deportivo. Para Brasil, en particular, se presenta como la gran oportunidad para dar el salto definitivo al primer mundo por la cantidad de inversiones en infraestructura y servicios, de todo tipo que tendrán que efectuar tanto desde el punto de vista deportivo, como de transporte y turismo entre otros y lo que, ello significará para la locomotora del sistema económico brasileño en inversiones, tecnología de punta, infraestructura de comunicaciones y red hotelera, empleo, etc.
Por eso, la creciente importancia de los servicios en los países desarrollados, y en la economía de los países emergentes y en desarrollo, los correspondientes al productor, propiciaron que ese sector se convirtiera en el determinante principal de la productividad y la competitividad. Así las cosas, el aumento del intercambio mundial en servicios fortaleció los vínculos entre comercio, tecnología, inversión y las olimpiadas son una muestra de ello.
Por otra parte, esto explica por qué los países desarrollados, emergentes y en vías de desarrollo y las empresas transnacionales consideran a los servicios como un sector estratégico en las negociaciones multilaterales en materia comercial. La inversión extranjera directa junto con la universalización de la producción ha tenido efectos considerables en la evolución reciente del comercio internacional de servicios. Un hecho fundamental de los últimos años es la tendencia de las grandes empresas a establecer sistemas integrados y complementarios de producción y comercialización.
Cuáles son a nuestro entender los principales servicios, primero están los gubernamentales englobando en ellos los de salud, educación, seguridad, administración de justicia, financieros estatales, de comercio exterior, política exterior entre otros. Otros, que debemos tomar en cuenta son, los informáticos y telemáticos en diferentes áreas, de comunicación, transporte de personas y bienes, sean estos aéreos, marítimos y terrestres, banca y seguros, consultoría, construcción, de entretenimiento y esparcimiento (donde ubicamos a los deportivos y al turismo) entre otros. Como se puede observar es un sector amplio con una fuerte influencia no solo en la economía de nuestros países sino en la economía mundial. La globalización se muestra en su manera más clara.
En este marco, se estima que más del 70% a 80% del comercio mundial, está en este sector, que desde mi perspectiva es estratégico y clave, para el desarrollo de nuestros países. Tener un sector de servicios fuerte, competitivo y con gran capacidad de adaptación tecnológica a los cambios del mundo de hoy, permitirá a nuestros países uma eficiente inserción en el mundo altamente globalizado.
Esta es uma de las tendencias que se ha profundizado hoy más, una economía mundial donde los servicios juegan un papel clave y definitorio en lograr altos niveles de estadio económico. (El Universal)