¿Tiene sentido la fe?

Como no me acostumbro a leer, subrayar, hacer anotaciones marginales y, en general, estudiar textos en medios electrónicos, mantengo suscripciones de impresos, como la publicación semanal de l’Osservatore Romano, en español.

Usted puede leerla en http://www.l’osservatoreromano.va.

En la edición del domingo 28 de octubre del 2012 consta la catequesis del papa Benedicto XVI, realizada durante la audiencia general del miércoles inmediato anterior, transcrita bajo el título ‘Por qué tiene aún sentido la fe’, tema que desarrolla a propósito de su declaratoria del Año de la Fe, iniciado el 11 de octubre del 2012, en el aniversario 50 de la apertura del Concilio Vaticano II, y que concluirá en la solemnidad de Cristo Rey, el 24 de noviembre del 2013.

Resumo varias afirmaciones suyas:

-Es necesaria una renovada educación en la fe, que nazca de un verdadero encuentro con Dios en Jesucristo, de amarle, de confiar en Él, de forma que toda la vida esté involucrada.

-Hoy, junto a tantos signos de bien, crece a nuestro alrededor también cierto desierto espiritual.

-Persisten muchas formas de explotación, manipulación, violencia, vejación, injusticia.

-Cierto tipo de cultura, además, ha educado a moverse solo en el horizonte de las cosas, de lo factible; a creer solo en lo que se ve y se toca con las propias manos.

-Crece también el número de cuantos se sienten desorientados y están disponibles para creer en cualquier cosa.

-En este contexto vuelven a emerger algunas preguntas: ¿qué sentido tiene vivir? ¿Hay un futuro para el hombre, para nosotros y para las nuevas generaciones? ¿En qué dirección orientar las elecciones de nuestra libertad para un resultado bueno y feliz en nuestra vida? ¿Qué nos espera tras el umbral de la muerte?

-Tenemos necesidad de amor, de significado y de esperanza, de un fundamento seguro.

-La fe nos dona precisamente esto: es un confiado entregarse a un “Tú” que es Dios; es un acto con el que me confío libremente a un Dios que es Padre y que me ama; es una adhesión que me dona esperanza y confianza.

-Dios ha revelado que su amor hacia cada uno de nosotros es sin medida, como lo demostró Jesús en la cruz: hasta el don de sí mismo, hasta el sacrificio total.

-La fe es creer en este amor de Dios que no decae frente a la maldad del hombre.

-Tener fe es encontrar a Dios, que me sostiene y me concede la promesa de un amor indestructible; es confiarme en Él con la actitud de un niño.

Además: -La confianza en la acción del Espíritu Santo nos debe impulsar siempre a ir y predicar el Evangelio. Aunque existe el riesgo del rechazo, no debemos desalentarnos.

-La fe es ante todo un don sobrenatural de Dios, pero también un acto profundamente libre y humano.

-Creer es fiarse con toda libertad y alegría del proyecto providencial de Dios sobre la historia.

¿Qué le parece? ¿Tiene sentido la fe? ¿Sería tan amable en darme su opinión?