Innovación para un desarrollo inteligente

César Huamanchumo, autor de estas líneas

A fines del pasado Noviembre, en Lima, La Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR) declaró a Perú como “Sede de la Ciencia, Tecnología e Innovación” (CTI), distinción que ostentará hasta que culmine su Presidencia Pro Tempore, en Julio 2013.

Tal nominación llega en momento preciso pues refuerza la política pro CTI que acertadamente el gobierno del presidente Humala viene implementando, incluso con dotación de importantes montos presupuestales.

Ahora, es vital generar un cambio cultural donde toda la gente participe y empiece a proponer ideas distintas y transformadoras, porque la innovación es tarea y parte de la vida diaria.  
La historia enseña diversos casos exitosos. Corea del Sur en los 60s, Costa Rica a fines de los 90s, Vietnam a comienzos del 2000. Ellos decidieron adoptar la tecnología e innovación para desarrollarse y elevar el bienestar de sus pueblos.

Durante la última década el Perú incrementó sus exportaciones, pero la composición de ellas muestra aumento de bienes primarios: 80% de los envíos son “rocks and crops” (minerales y cultivos) y apenas 20% manufacturas.  

Innovar significa también la obligación que tienen los dirigentes políticos en modificar sus discursos y propuestas, actualizándolas al momentun global, abandonando las muletillas vacías de significado.

Una de ellas, repetida con entusiasmo escolar por muchos ministros de comercio exterior, es que  “el país se halla abocado a buscar nuevos  mercados”,  como si todavía existiesen en el mundo áreas geográficas o demandas al margen de las corrientes de comercio exterior.

Lo real e innovador consiste en fomentar la producción de nuevos bienes y servicios dirigidos a potenciales compradores. Por ejemplo, casi nadie habla de las posibilidades inmensas de las industrias creativas.

El Plan Estratégico de PRODUCE no menciona una línea al respecto. Sin embargo, el plato de fondo innovador radica en diseñar nuevos negocios con potente creación de valor global, tal como algunos consorcios ya lo vienen haciendo.       

Sugiero iniciar una corriente de opinión pública de trabajadores, funcionarios, estudiantes, empresarios y amas de casa, a fin de lograr que el gobierno declare al 2013 como “Año de la Innovación y el Emprendimiento”.  

No más Declaración de Año con mensajes vacíos o compasivos. La niñez y juventud peruanas deben transitar hacia el mañana, nutriéndose de una atmósfera emprendedora y talento creativo, aceleradores del desarrollo inclusivo.

Corresponderá a CONCYTEC  dar musculatura al lema del 2013, liderando  la ejecución de programas motivadores de innovación y emprendimiento por el país, para que nuestras ambiciones de modernidad y solidaridad se vistan de realidad.

Para terminar, la “piconada” de siempre. Chile ya vive el 2012 como “Año del Emprendimiento”. Y va a declarar el 2013 como “Año de la Innovación” habiendo destinado para el próximo año, 8.9% del presupuesto del gobierno central a la Innovación, Emprendimiento y Competitividad.

César Huamanchumo. 12 Diciembre 2012