El Departamento de Operaciones de la Paz de la ONU tiene la intención de desplegar una unidad de al menos tres drones de vigilancia no armados en la región oriental del Congo.
Esto sería la primera vez que la ONU planea desplegar una flota de aviones no tripulados de vigilancia de sus propias misiones en África central y occidental.
Sin embargo, el plan está encontrando oposición, en particular por parte de los Gobiernos de países en desarrollo, que temen que los drones abran un nuevo frente de inteligencia dominado por potencias occidentales y que además reemplacen potencialmente a las tropas de las fuerzas de paz africanas y asiáticas que actualmente son los “ojos y los oídos” de la ONU
Por su parte, los funcionarios de las Naciones Unidas aseguran que no tienen intención de armar a los drones ni de espiar a los países que no han dado su consentimiento para su utilización. No obstante, numerosos países tienen dudas acerca de quién tendrá acceso a las imágenes y datos de inteligencia recopilados por los aviones no tripulados.
Además de Ruanda, otras naciones como China, Rusia, Pakistán y Guatemala expresaron su preocupación ante el plan, pero EE.UU., el Reino Unido, Francia y otros miembros occidentales del Consejo de Seguridad respaldan la propuesta, afirmando que la ONU tiene que modernizar su papel en las labores de mantenimiento de la paz.