Hoy se dio a conocer China y Japón han entrado en una carrera armamentista entre los dos países.
Los científicos y militares de ambos países buscan potenciar su flota de aviones no tripulados, que deberían convertirse en argumento decisivo en la disputa acerca del archipiélago Senkaku.
China anunció el desarrollo de un avión de combate no tripulado. Pekín afirma que el drone será desarrollado con tecnología puramente china pero expertos en aeronáutica sospechan que se usarán elementos copiados del drone estadounidense X-47B.
Por su parte Japón intenta seguir el ritmo de su rival. El Gobierno japonés ha anunciado sus planes de adquirir dos o tres drones de reconocimiento estadounidenses Global Hawk. Con estos aparatos de gran autonomía de vuelo (más de 30 horas) las fuerzas niponas podrán potenciar la vigilancia en la zona del archipiélago Senkaku.
Con el transcurso de unos meses Japón también desarrollará sus propios Drones mejorando el prototipo estadounidense.