Nacionalismo no es burocratismo

Eduardo Bueno León, autor de estas líneas

Es falso que el llamado "alto crecimiento" sea solo durante la etapa neoliberal. Durante la etapa de la sustitución de importaciones para la industrialización, el crecimiento fue sostenido y alto. Dicho modelo respondió a una etapa del crecimiento económico global, que se agotó en los años ochenta con el tema de la deuda externa y los planes de ajuste. No se debe tampoco ocultar, que actualmente, la exportación de minerales genera el 70% del crecimiento. Y que esas exportaciones son cíclicas. El modelo es extractivista, no industrializador, que finalmente es lo que genera el valor agregado. Es un neoliberalismo elemental y primitivo, cuyas rectificaciones recién han comenzado con el gobierno de OH.También es cierto que el mercado interno se ha fortalecido, pero en base a la construcción (cuyos insumos se importan), la cual se expande sin control ni regulación alguna. Se está construyendo departamentos pequeños y caros, siendo la base, el endeudamiento de la gente.

El nacionalismo, sigue vigente, apoyándose en la sociedad civil y las energías regionales. Los países más globalizados, son los más nacionalistas. La propaganda de la derecha ha difundido en el Perú, que nacionalismo es igual a estatismo o mercados cerrados Y quienes han leído a Haya de la Torre y no han mandado al tacho sus libros (como Alan, Mulder, Barreda), saben perfectamente, que el nacionalismo antimperialista, es regulacionista y no se debe permitir que el mercado arrase con los recursos ni golpee a la gente en sus ingresos. El regulacionismo se apoya en el Estado como decisión, pero sus mecanismos de poder descansan en el pueblo, las clases sociales productoras, las regiones, la sociedad civi,l los nuevos partidos populares.

Debemos tener un Estado rector y fuerte, para tomar decisiones. Y el burocratismo es todo lo opuesto. En su primer gobierno, García confundió nacionalismo con estatismo y  rectoría del estado con burocratismo. En su segundo gobierno dejó las decisiones públicas en manos de lobis, impuso una dictadura tecnocrática y fragmentó a las instituciones políticas para debilitar al Estado, incumpliendo todas sus promesas.

En el Perú lamentablemente, quienes dirigen al PAP han demostrado ser ignorantes, corruptos poco estudiosos, neoliberales por oportunismo, apañadores de la corrupción, acomodando los hechos y datos a sus nuevos patrones: El lobismo minero y  bancario.

No hay ninguna posibilidad de renovación dentro del Partido Alanista Privado. Ya todo está amarrado para el 2016.