Banner Tuvivienda
Martes 14 de mayo 2024   |   Contáctenos
REDES SOCIALES
Miércoles 06 de marzo 2013

La muerte de Chávez, discurso de Maduro y sucesión en Venezuela, primeros apuntes

Por: Mauricio Meschoulam (*)
La muerte de Chávez, discurso de Maduro y sucesión en Venezuela, primeros apuntes
Foto: Difusión


Mauricio Meschoulam, autor de estas líneas


Esta mañana era claro que la sucesión en Venezuela había comenzado. Evidentemente la batalla por el poder no está aún completamente definida en favor del chavismo. La mejor prueba de ello se presenta con la necesidad de formular un discurso que resulta muy poco creíble ante los ojos de muchos, pero altamente eficaz en cuanto conseguir respaldo interno: Una conspiración orquestada por el imperialismo estadounidense y la oligarquía antipatria buscaría detener la revolución bolivariana. Chávez, en este discurso, no habría enfermado de manera natural, sino que habría sido víctima de un ataque perpetrado por esa conspiración. En esa lógica, los seguidores del chavismo están con la revolución; y la oposición, empezando por Capriles, está con la conspiración. Así se dibuja la campaña que viene, así como la lucha por ocupar el vacío que ha dejado el carismático líder.

1. Todos estábamos a la espera del anuncio pero el anuncio no se dio. Chávez aún no había sido declarado incapacitado para gobernar, por lo que el proceso de sucesión oficialmente no había dado inicio. Sin embargo, si a alguien quedaba duda alguna, ya era clarísimo que Hugo Chávez no regresaría a comandar Venezuela. Por consiguiente, todo lo que desde esos instantes se estaba jugando tenía que ver ya con lo que hay hacia adelante, una campaña que arranca ahora y que culminará con las elecciones anticipadas en su debido momento.

2. Eso significa, por supuesto, de entrada, que todos los análisis que se habían venido efectuando al respecto de una Venezuela sin Chávez siguen siendo vigentes. En este blog hicimos uno hace varias semanas.

3. La ausencia de Chávez debe ser sumamente difícil para sus seguidores y para los políticos quienes tienen hoy la tarea de sustituir a semejante líder. Ese factor tiene que estar pesando en la necesidad de formular un discurso coherente con la ideología que Chávez fue tejiendo desde hace muchos años, pero que incluso dé algunos pasos adicionales con el fin de intentar mantener la unidad del chavismo en torno a la figura del líder supremo y en contra de la conspiración de los enemigos.

4. Por consiguiente, lo presentado por Nicolás Maduro en la mañana del 5 de marzo es un discurso destinado tanto a la clase política como a la población venezolana, el claro dibujo de una imagen que será empleada a lo largo de su campaña: Una conspiración orquestada desde Washington que responde a intereses internacionales pero que ha hecho una alianza con la oposición, con esa oligarquía anti-patria, cuyo máximo exponente es hoy Henrique Capriles. (¿Qué otra cosa estaría haciendo Capriles en Nueva York precisamente ahora sino conspirando en contra de la revolución?)

5. Esta conspiración, en el discurso presentado, ha sido incluso capaz de plantar la enfermedad que mató a Chávez. Las pruebas científicas serían aportadas en su debido momento, pero por ahora eso resulta irrelevante en términos discursivos, el golpe está debidamente asestado. En el imaginario colectivo de los seguidores de Chávez, su líder no enfermó; lo enfermaron, tal y como sucedió con Arafat (situación que aún no ha sido demostrada, por cierto; las investigaciones se encuentran en curso. Pero discursivamente, una vez más, eso es irrelevante).

6. Bajo esa premisa, el empleo del recurso discursivo acerca de los enemigos externos resulta coherente. Se expulsa de Venezuela no a uno sino a dos agregados militares estadounidenses, se advierte a Washington el dejar de obstaculizar la revolución bolivariana y se asocia a la oposición con los enemigos extranjeros.

7. La única forma de protegerse frente a esas amenazas externas es, como nunca, el cierre de filas del chavismo. Esta familia unida en torno a la imagen, figura y discurso del líder, podrá defender la revolución de todos aquellos quienes buscan su destrucción.

Para comprender más a fondo ese discurso, hay que considerar los siguientes elementos:

a) El chavismo tiene muchas posibilidades de ganar en unas elecciones en contra de Capriles, pero su victoria no se encuentra completamente asegurada. El oficialismo cuenta con la mayoría pero no todos los asientos (95 de un total de 165) de la Asamblea General, la única cámara del poder legislativo en ese país. En las últimas elecciones presidenciales, la oposición consiguió casi el 45% de la votación. A pesar de que el chavismo obtuvo la victoria en casi todas las gubernaturas en diciembre, el contendiente de Chávez en las elecciones presidenciales, Henrique Capriles, renovó su gubernatura en Miranda y si ya compitió ante Chávez con todo lo que ello implica, seguramente representará para Maduro un nada sencillo rival a vencer.

b) Además de la oposición, Maduro necesita unificar posturas al interior del chavismo y garantizar la cohesión de la clase política frente a la ausencia del máximo líder. Esta nada fácil tarea seguramente está pesando ya mismo en la selección de cada palabra empleada por Maduro.

Esta serie de factores pueden apenas comenzar a explicar quizás algunas de las razones para haber elegido el tipo de discurso (y campaña) que se está eligiendo. Lo que sigue es entrar de lleno en la fase en la que los sucesores de Chávez harán todo cuanto esté en sus manos para seguir gobernando Venezuela. Mientras tanto, faltará mucho que escribir acerca de lo que significará la ausencia de Chávez. Mi idea acá era simplemente aportar unos primeros apuntes.

¿Usted cómo lo vio?

Twitter: @maurimm

 (*) Publicado en el portal www.eluniversal.com.mx, en la sección correspondiente a los blogs

Participa:
Valorar
Cargando...
COMENTARIOS
0 comentarios
2018 Grupo Generaccion . Todos los derechos reservados    |  
Desarrollo Web: Luis A. Canaza Alfaro    |    
Editor de fotografía: Cesar Augusto Revilla Chihuan