África del Norte se ha convertido en una bomba silenciosa a punto de estallar. Los terroristas yihadistas de Al Qaeda casi se apoderan de un país, Mali. Hoy pueden infiltrarse en el Sáhara Occidental, territorio invadido por Marruecos, que está desarrollando una criminal limpieza étnica contra la población nativa: los saharauis, a tal punto que todos los organismos internacionales de derechos humanos han condenado la política marroquí de violar esos derechos y aplicar la tortura, desde Amnesty Internacional, Human Right Watch, Centro Robert Kennedy, hasta el Parlamento Europeo y los propios organismos ONU de Defensa de los Derechos humanos y Contra la Tortura.
Como la violación de derechos humanos es permanente, durante muchos años la comunidad mundial ha solicitado que la Minurso, esto es, la Misión de las Naciones Unidas para el Referéndum del Sáhara Occidental, tenga la facultad de vigilancia de los derechos humanos. A ello se ha opuesto siempre Marruecos, contando con el apoyo –en especial- de Francia, miembro del Consejo de Seguridad con poder de veto. En esta semana, este organismo decidirá la prórroga de la permanencia de la Minurso y debatirá su nueva responsabilidad que es la defensa de los derechos humanos.
El mundo está mirando el comportamiento de Francia y su nuevo gobierno, que preside Francois Hollande, un hombre que puede cambiar la historia y enrumbar a su país a la decencia, al respeto al Derecho Internacional y a la defensa de los derechos humanos. Veremos cómo maniobra y comprobaremos si es prisionero del establishment francés o impone una nueva postura que dignificará a Francia.
Ya lo hizo, Estados Unidos, que acaba de apoyar la vigilancia de derechos humanos en el Sáhara Occidental. Su Secretario de Estado, John Kerry es hombre de principios. Cuando se desempeñó como presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores, apoyó la causa saharaui. Hoy, como Secretario de Estado, gira la política de su país hacia una defensa de principios, del Derecho Internacional y de los derechos humanos. Lo dijimos el 10 de abril en: http://rsanchezserra.blogspot.com/2013/04/apoyar-al-pueblo-saharaui-es-una.HTML.
La decisión de Estados Unidos ha causado conmoción en Marruecos, que hasta han cancelado las maniobras militares “León Africano”, que suelen celebrar anualmente.
El propio Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon ha solicitado se amplíe a la Minurso atribuciones a la vigilancia de los derechos humanos. “Teniendo en cuenta los constantes informes sobre violaciones de Derechos Humanos, cada vez es más urgente y necesario el establecimiento de una supervisión independiente, imparcial, completa y sostenida de la situación de los Derechos Humanos tanto en el Sáhara Occidental como en los campamentos”, señala.
La ONU considera insostenible el “statu quo” en el Sáhara Occidental, esto es, que continúe la invasión marroquí en un territorio que no es el suyo (y que contradice la consulta del Tribunal de La Haya y numerosas resoluciones de la propia NNUU), que no se realice el ansiado referendo que espera el pueblo saharaui desde 1975, el drama humanitario que padece la población saharaui en el desierto de Tinduf debido a la oposición marroquí de concretarse el referendo de autodeterminación, la perenne violación de los derechos humanos en los territorios ocupados por Marruecos y el uso de la tortura contra los saharauis, la explotación ilegal de las riquezas saharauis.
Ningún país del mundo, incluido sus propios aliados Francia y Estados Unidos, reconoce la invasión marroquí al Sáhara Occidental.
Publicado en el DIARIO NUEVO SOL, de Lima-Perú, el 23 de abril de 2013
(*) Periodista. Miembro de la Prensa Extranjera. Analista internacional.
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