El primer ministro Recep Tayyip Erdogan, dijo hoy lunes que Turquía "no se va abstenerse" de responder a dos atentados con coche bomba que ha culpado a Siria, pero también dijo que el gobierno tenga cuidado de no dejarse arrastrar a la guerra civil de su vecino.
Potentes atentados del sábado en una ciudad fronteriza que es un centro principal para los refugiados sirios y los rebeldes, fue el ataque más sangriento en Turquía en los últimos años. Se intensificó las tensiones entre los dos antiguos aliados y aumentó los temores del conflicto en Siria podría engullir a Turquía. La cifra oficial de muertos en los atentados era de 46.
Siria ha negado estar detrás de los ataques. Autoridades turcas, sin embargo, dijeron que habían detenido a nueve ciudadanos turcos, con enlaces a la agencia de inteligencia de Siria en relación con los ataques, entre ellos un presunto cabecilla.
Erdogan dijo que Turquía no tenía ninguna duda acerca de la participación de Siria y llamó a la negativa de Siria como una mentira.
"El hecho es, con certeza, un incidente conectado al régimen", dijo Erdogan. "Su mundo se basa en la mentira".
Dijo que Turquía no se abstendría de "dar la respuesta necesaria", pero también indicó que el gobierno quería actuar con moderación.
"No debemos entrar en una política de tensión", dijo Erdogan. "Tenemos que tomar las medidas que se requieren para ser tomadas por los grandes estados".
"No vamos a caer en la trampa, pero vamos a dar la respuesta necesaria en el momento necesario. Nosotros no vamos a abstenernos de esto", dijo sin dar más detalles.
Los líderes occidentales enfrentan una presión cada vez mayor para encontrar una manera de poner fin a la crisis.