El Presidente de la República de China (Taiwán), Ma Ying-jeou
El Presidente de la República de China (Taiwán), Ma Ying-jeou, reiteró el martes 28 que su Administración estaba determinada a buscar la justicia para el pescador taiwanés que murió recientemente de los disparos hechos por un barco oficial de Filipinas cuando estaba faenando en las aguas de coincidencia de los dos países.
El Primer Mandatario hizo tales declaraciones en el curso de la audiencia que les concedió en el Palacio Presidencial a todos los miembros de una delegación parlamentaria de Corea del Sur, que se encuentran actualmente visitando Taiwán.
"La República de China (Taiwán) es un país amante de la paz," sostuvo el Presidente Ma, añadiendo sin embargo que su Administración iría a hacer todos los esfuerzos a su alcance para buscar la justicia para cualquier ciudadano del país que fuese asesinado.
"Vamos a insistir en esto hasta el final," recalcó el Mandatario al momento de referirse al incidente de disparo del 9 del presente mes involucrando a un barco oficial filipino, que resultó en la muerte del pescador Hung Shih-cheng, de 65 años de edad, de los disparos hechos por el barco oficial filipino al barco pesquero taiwanés "Kuang Ta Hsing No. 28", cuando estaba faenando en las aguas de coincidencia de los dos países.
Ma recalcó que su Administración esperaba que los dos países pudieran terminar las investigaciones concernientes sobre el fatal incidente lo más pronto posible, en base al principio de igualdad y reciprocidad, con el objetivo de aclarar la realidad de dicho incidente, y a consecuencia haciendo que las personas culpables pudieran recibir el castigo que se merecen.
En otro aspecto, Ma aseguró que su Administración seguirá haciendo todos los esfuerzos a su alcance para proteger la seguridad de todos los ciudadanos filipinos residiendo y trabajando en Taiwán, no permitiendo que la ira del pueblo taiwanés hacia el gobierno filipino por la muerte del infortunado pescador Hung fuese transferida a los inocentes ciudadanos filipinos.
Con un consenso alcanzado después de intensas negociaciones de varios días de duración, Taiwán y Filipinas comenzaron el lunes 27 una investigación cooperativa sobre la muerte del pescador taiwanés, contando con los investigadores de los dos países realizando sus respectivas investigaciones al respecto en el otro país.