El negro "Mama" en la historia

¿Le parece que el “Negro Mama” es el “Negro Mamarracho”?


La multa aplicada al canal 2 de TV Frecuencia Latina, por la presentación del personaje “Negro Mama”, ha despertado una antigua polémica sobre la discriminación racial en Perú. El chistoso “Mama” solo es la punta del iceberg. Cierta TV peruana se burla todos los días de mucha gente, en su mayoría negros y serranos, que trabajan para ganar unos cuantos soles, aunque en su aventura pierdan un poco de dignidad.

La ventaja la tiene la “blancocracia” tradicional: semiblancos, protoblancos, cuasiblancos, blancoides,  blanquitos, blancones y blanqueados. En TV estas minorías raciales son los  privilegiados por publicistas, productores y conductores de realities. A Los peruanos de ascendencia negra se les conoce con la etiqueta de zambos, mulatos, morenos, morochos, mestizos o “crespitos”. El caso del negrito de “Jueves de pavita” para San Fernando la pavita solo es una botón de muestra.

Los afroperuanos solo constituyen una de las minorías de la sociedad pluricultural del Perú. Existen otras minorías y una mayoría compuesta por la cultura andina, que es objeto de burla y humillación en la TV y en cualquier lugar donde exista gente acomplejada.  Exceptuando a unos pocos futbolistas, que ganan mucho dinero, las personas de raza negra son consideradas “poca cosa” en el Perú. Con exclusión de los intelectuales que -por serlo- no son tan populares como el chistoso “Mama”.

No solo los ignorantes sino también los ilustrados -incluyendo a personajes históricos- han menospreciado a los afroperuanos. Tampoco es defecto de los pobres sino también de los ricos. Casi todo el mundo -incluyendo a los serranos- se considera por encima de la gente afroperuana. Son conocidos los casos de porteros de raza negra que trabajan en los hoteles de 5 estrellas. Se les contrata porque su imagen  permite a los clientes  “blancos” sentirse superiores.

Los notables y los negros

Inclusive José Carlos Mariátegui,  en su virtuoso Siete ensayos de interpretación de la realidad peruana,  ha vapuleado a la minoría  afroperuana. Pensó y dijo: « La raza negra, importada a la América Latina por los colonizadores para aumentar su poder sobre la raza indígena americana, llenó pasivamente su función colonialista. Explotada ella misma duramente, reforzó la opresión de la raza indígena por los conquistadores españoles. [...]

Se entiende que « El Amauta »  califica a los negros traídos por los españoles como instrumentos rudimentarios pero útiles de dominación. La razón es que a los negros de África fueron « importados » para ser utilizados como mano de obra esclava, que competía o reemplazaba a los indígenas dominados por los españoles y por los propios peruanos de la naciente clase criolla en el Perú independiente.

Abramos otra página de la historia: El libertador José Francisco de San Martín y Matorras, como buen mestizo,  conformó el ejército de los Andes con 3778 soldados de tropa (formado por una mayoría de soldados negros y mulatos, más de la mitad esclavos libertos, y por una parte de soldados chilenos). Su objetivo era acabar con la dominación española en Chile, restaurar el gobierno independentista y poner fin al dominio español en el virreinato del Perú. Los negros cumplieron su rol histórico.

La normatividad protectora

Hagamos una revisión de la normatividad que defiende al negro “Mama”. La Constitución Política del Perú en su artículo 1° dice a la letra: “La defensa de la persona humana y el respeto de su dignidad son el fin supremo de la sociedad y del Estado”. Lo cual quiere decir, en lenguaje ontológico, que todos somos iguales  y que por ello merecemos igual trato en la sociedad. (Incluido el afroperuano). Así lo dice la Constitución, pero otra cosa dice doña realidad.

Por su parte, la religión casi siempre identifica a la persona humana como un semejante o prójimo, que se refiere a cualquier hombre que en relación con otros hombres son iguales por pertenecer a la humanidad. Según la Biblia, Jesús también dijo: “Tienes que amar a tu prójimo como a ti mismo”. (Mateo 22:39.) Toda persona en su sano juicio se ama a sí misma y quiere lo mejor para sí. Es Correcto.

La discriminación del afroperuano: Un problema cultural

Entonces ¿por qué se piensa que el negro “Mama” no merece el amor de sus semejantes? Los derechos humanos del negro -técnicamente pensando- no son ninguna “cojudez”. Entonces ¿por qué al negro “Mama” se le tiene que defender como si fuera un pobre hombre de segunda categoría? ¿Por qué las ONGs tienen que salir en su defensa? Ni siquiera  la iglesia católica ha puesto las manos al fuego por los afroperuanos.
 
El problema tiene que ver con la realidad de la cultura y la sociedad  peruana. El tema  viene desde la época de la Colonia, con la esclavitud,  y de la independencia, con la explotación de los negros. A los negros se les ha tratado con injusticia en la República, a pesar de su contribución a la causa de la Independencia. Su heroicidad no ha sido escrita en las páginas inciertas de la historia del Perú. Es un problema de identidad cultural.
Una sanción ejemplar que debe ser un precedente
El Ministerio de Transportes y Comunicaciones multó con 74 mil soles a Frecuencia Latina por no haber cumplido -según dice- con la resolución  emitida por la Sociedad Nacional de Radio y Televisión) el 2010, por actos discriminatorios que afectan la dignidad humana a través del personaje ‘Negro Mama’. La televisora no cumplió con el artículo 76° de la Ley de Radio y Televisión, que considera como una infracción grave el incumplimiento de las disposiciones del Código de Ética del organismo de radio y TV.

Se trata sin duda de una medida moralizadora, que sería apropiado extender a otros espacios. La TV peruana -con raras excepciones- está plagada de infracciones contra el código de ética y las autoridades no dicen “esta boca es mía”. Prefieren hacer la “vista gorda”. La disyuntiva entre velar por la salud moral de la familia, o congraciarse con los anunciadores, se resuelve en contra del público que carga con la ignominia.

 El Art. 40° de la ley de radio y TV prescribe el horario familiar. “La programación que se transmita en el horario familiar debe evitar los contenidos violentos, obscenos o de otra índole, que puedan afectar los valores inherentes a la familia, los niños y adolescentes. Este horario es el comprendido entre las 06:00 y 22:00 horas”.  Es letra muerta. Los programas de cierta TV están plagados de contenidos obscenos, violentos, discriminatorios y que ofenden la inteligencia del televidente.

La discriminación de los serranos

Pongamos como ejemplo a la serrana “Pánfila”, que representa a una persona  disminuida en su personalidad, que es objeto de “comicidad”, en un conocido reality. Por otro lado, la mayoría de realities que cautivan a las telefanáticas,  juegan con los estereotipos de evidente discriminación racial y falta  de respeto a la sexualidad de las mujeres. La dignidad humana no es un valor que figure en el diccionario de cierta TV peruana.

Algunos productores de “éxito” consideran al público como cultura de masas, que merecen una valla de calidad cuyo rango parece ir solo de estúpidos a  idiotas. No pasarían de 80 puntos de cociente intelectual. Esta gente aceptaría-según el marketing televisivo-   cualquier bodrio en la pantalla.  Es el público objetivo que han formado (deformado) desde la niñez hasta la adultez.  Público cautivo en el círculo vicioso que le ha tendido cierta TV peruana por ambición al rating. (Crímenes, calatas y fútbol).

Los escritores se pronuncian

Volviendo al tema que motiva este escrito. Es una medida ejemplar la protección del negro “Mama”. Lo censurable es que al negro “Mama” se le trata como un negro “Mamarracho”.(Persona mal vestida, estrafalaria e indigna de respeto). Pero es solo una acción esporádica. Si el Estado pretende moralizar cierta TV peruana, ahí tienen tantos programas que deben ser observados por los organismos reguladores que se preocupan de valores humanos. Por cierto que no estamos de acuerdo con los ataques  a la dignidad de los afroperuanos en cierta TV.

Dice el Nobel Vargas Llosa: “La televisión (…) en lugar de contribuir a elevar la cultura y la sensibilidad de todo el mundo, ha banalizado, frivolizado y —me atrevo a decir— aumentado el nivel de imbecilidad en un gran número de seres humanos, a quienes las imágenes de los programas más exitosos de la pequeña pantalla —dechados de vulgaridad, chismografía y amarillismo periodístico— exoneran de preocupaciones, inquietudes espirituales e intelectuales y hasta de la incomodidad de pensar.”

Antonio Gálvez Ronceros ha narrado una conversación entre el negro Andrés y su hija:

—¡Pátora! —los labios se le habían hinchado y parecían pelotas. Saliendo de la habitación contigua, Pastora se presentó alarmada.

—Pátora, tú que sabe equirbí, hame una cadta pa mandársela hata la Punta e la Ila a ese caporá Basadúa, que nueta acá y sia ido pallá depué quiabló mal de mí. Yo te vua decí qué vas a poné en er papé.
—Ya, tata, vua traé papé y lápice —dijo la hija. Se metió en lo interiores de la casa y poco después regresó.

—Ponle ahí, Pátora—dijo don Andrés—, que su boca es una miera, que su diente es ota miera, su palaibra un montón de miera… Miera esa mula que monta. Miera su epuela. Miera su rebenque. Miera el sombreiro con quianda. Miera esa cotumbe e miera diandá mirando trabajo ajeno…Léemela, Pátora, a ve qué fartra.

Cuando la hija acabó de leer, don Andrés tenía un gesto de duda como si ya no confiara del todo en sus propias palabras

—Oye, Pátora—dijo finalmente—quítale un poco e miera a ese papé.

Un negro sabio.

¿Le parece que el “Negro Mamarracho” es el “Negro Mama”?

(*) Periodista, escritor, historiador, administrador, docente universitario  nacido en el Callao. Ganador del primer premio en el concurso Interuniversitario de poesía y cuento 1990.Ex director de la revista peruana de cultura Creación.  Autor, entre otros libros, de Hezpez entre hom y el amor”, Historia del Callao. Miembro de la Unión Hispanomundial, de Escritores- UHE, Red Mundial de Escritores en Español-REMES, y Poetas del Mundo.com.