Banner Tuvivienda
Viernes 26 de abril 2024   |   Contáctenos
REDES SOCIALES
Viernes 04 de octubre 2013

¿Qali warma programa estrella?

Por: Fernando Pilco Castañeda (*)
¿Qali warma programa estrella?
Foto: Difusión


Fernando Pilco Castañeda, autor de estas líneas


Desde enero del presente año el gobierno de la inclusión social puso en marcha el bastante promocionado programa de Asistencia Alimentaria Qali Warma, programa que remplazaría al estigmatizado PRONAA. La formula casi mágica propalada por la novel Ministra Carolina Treveli, del pomposo Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social, hoy remplazada por Mónica Rubio, fue preparada, diseñada, elaborada y hasta macerada por casi año y medio. Evidentemente, el mismo, nunca fue probada y menos validada por los actores más importantes o sustanciales de cualquier programa social: sus beneficiarios. Es decir, los 2'700,000 escolares.

Como queda absolutamente probado, con la información proporcionada por la pagina web de propio MIDIS, el único piloto fue realizado en el mes octubre del 2012, en la ciudad de Ayacucho en siete colegios con un número sumado de alumnos que no exceden a los mil; distribuidos 980 escolares de la zona urbana y 20 de la zona rural. Es decir, el piloto no significó ni el 0,5% de la población beneficiaria. Entonces, con esta minúscula prueba, no solo convalidan las ocho regiones alimentarias que el programa ha diseñado sino además las recetas para cada una de ellas. Por ello, la pregunta salta a la vista: ¿Cómo con esa información de los escolares de Ayacucho convalido los recetarios de las regiones del norte o las regiones de selva o el alto andino?

Es más, en el diseño de este idílico programa, el proveedor de los alimentos contenidos en los recetarios de cada región, con conformidad a la normativa publicada " Manual de Compras", deberían ser preferentemente las pequeñas empresas de las diferentes zonas del país, las mismas que nunca fueron convocadas y mucho menos informadas del servicio que el nuevo programa Qali Warma iba a requerir. Por ende, la adecuación de infraestructura y estandarización en calidad e higiene no se pudo alcanzar; situación que ha quedado evidenciada en el fallido proceso de compra de febrero último en el que no han llegado a atenderse ni el 50% de los escolares más pobres del Perú; siendo más preocupante aun, que el servicio prestado adolece de las condiciones de salubridad e higiene requeridas para la alimentación de los niños beneficiarios, situación denunciada en muchas zonas del país y que ha merecido la atención de importantes programas de la televisión nacional.

Dicen que toda comparación es odiosa, pero en el presente caso vale la pena correr el riesgo. El PRONAA, aunque estigmatizado, no fue menos operativo como demuestran sus veinte años de funcionamiento al servicio de la alimentación de los más pobres. Pese a sus eventuales problemas, contaba con un presupuesto de aproximadamente 600 millones anuales para compra de alimentos que atendían a aproximadamente 4 millones de personas beneficiarias; entre ellas madres gestantes, niños de 0 a 36 meses, poblaciones vulnerables ( albergues, comedores de personas con discapacidad, etc.) y el subprograma escolar; además de atender con eficiencia y oportunidad las emergencias por inundaciones y desastres naturales de la población en riesgo; todo esto con el 15% de ese monto, es decir 90 millones anuales, monto que costeaba el aparato burocrático que permitía operar al extinto PRONAA.

El novel programa QALIWARMA cuenta con un presupuesto para el presente año 2013 de aproximadamente 900 millones de nuevos soles para la adquisición de los alimentos que proporcionarán solo al subprograma escolar de 2'700 000 (dos millones setecientos mil) escolares; es decir, 300 millones de nuevos soles más que el presupuesto del extinto PRONAA y beneficiando a 1'300 000 (un millón trescientos mil) menos.

Por otro lado, para realizar su funcionamiento - de conformidad al requerimiento de personal, publicado en el PAP (Presupuesto Analítico de Personal)- se requiere del 22% de los 900 millones de nuevos soles, lo que implica que la burocracia del novel programa nos costara a todos los peruanos la suma de aproximadamente 198 millones de nuevos soles. Dos PRONAA. ¿Y para qué?, nos preguntamos algunos. Obviamente la respuesta es, para tener un nacionalismo vigoroso y fuerte que permita disponer de los recursos del estado de manera nacionalistamente inclusiva.

Una evaluación un poco mas detallada de la cronología de su puesta en marcha nos deja la misma sensación de preocupación por decir lo menos, pasemos a los datos proporcionados y absolutamente comprobables por cualquier ciudadano de a pie, ya que estos provienen de las publicaciones del propio ministerio, de la página web del programa mismo o del diario oficial El Peruano.

Es pertinente señalar también que otros actores importantísimos en el cuestionado programa QW son los padres de familia y por supuesto los directores y profesores de los colegios más pobres, pues ellos no solo participan de manera directa en el proceso de determinación de los alimentos a adquirir pero también, en algunos casos, en la preparación, almacenamiento, supervisión y control de los desayunos y almuerzos que proporcionen los proveedores locales. Éstas importantes tareas deberían haber contado con una capacitación o tal vez con información oportuna de cómo deben ser llevadas a cabo; de ésta manera, muy probablemente, el mencionado programa hubiese tenido mejores resultados en estos siete primeros meses.

Finalmente, es posible que una profundización mayor en la investigación del diseño e implementación del programa nos pueda dar mas sorpresas desagradables en cuanto a la improvisación con la que se ha actuado para atender al futuro y al bien más preciado de una nación: Nuestros hijos.

(*) Ex Director Ejecutivo del PRONAA, ex Presidente de la Sociedad de Beneficencia Publica de Lima y ex Presidente del Directorio del Consejo Nacional Para las Personas con Discapacidad (CONADIS)

Participa:
Valorar
Cargando...
COMENTARIOS
0 comentarios
2018 Grupo Generaccion . Todos los derechos reservados    |  
Desarrollo Web: Luis A. Canaza Alfaro    |    
Editor de fotografía: Cesar Augusto Revilla Chihuan