La quimioterapia que ha sufrido como consecuencia del cáncer de mama hizo que perdiera el pelo, por lo que sus amigos se han afeitado las cabezas en la solidaridad.
Gerdi McKenna tomó todo el apoyo posible de sus amigos después que le diagnosticaran cáncer de mama.
Las mujeres se reunieron todas en un salón de belleza en Johannesburgo donde, seguido por las cámaras de televisión y fotógrafos, cambiaron sus peinados.
La intención es no sentirse "diferente" Gerdi y apoyarla en su lucha contra la enfermedad.
Gran sorpresa para la mujer que vio el gesto de sus amigos y se echó a llorar.