Viernes 26 de abril 2024 | Contáctenos
La Academia Real de Ciencias de Suecia otorgó este lunes 13 de octubre el Premio Nobel de Economía al francés Jean Tirole, presidente de la Toulouse School of Economics. Los trabajos del economista galo sobre el poder del mercado y la reglamentación hacen, de acuerdo al jurado, de él “uno de los economistas más influyentes de nuestro tiempo”.
“Ha logrado progresos teóricos y hecho contribuciones en la investigación en un número de campos, pero sobre todo ha clarificado la forma de comprender y reglamentar las industrias (dominadas) por algunas empresas poderosas”, señaló el comité Nobel. Añadiendo que “Numerosos mercados son dominados por algunas empresas que influencian en la formación de todos los precios, los volúmenes y la calidad”, añadió el jurado; subrayando asimismo que “la teoría económica tradicional no trata ese caso, conocido bajo el nombre de oligopolio. En lugar de todo eso, la teoría supone que solo hay un monopolio o bien la situación conocida bajo el nombre de competencia perfecta”.
El aporte de Jean Tirole ha consistido en mostrar la necesidad de regular tanto las industrias oligopolísticas como los monopolios y conducir sus investigaciones utilizando nuevos marcos conceptuales como la teoría de juegos o la teoría de contratos. Las últimas décadas han estado signadas por procesos de concentración en numerosos sectores industriales y por la emergencia de empresas en situación oligopolística, en particular en el sector de las tecnologías, como son el caso de Microsoft y Google. La crisis financiera desencadenada en el 2008, planteó el problema de los bancos, organizaciones demasiado grandes para quebrar, crecimiento conseguido a través de numerosas fusiones ligadas a la desreglamentación financiera.
Las privatizaciones han contribuido también a la creación de mercados dominados. “Numerosos gobiernos abrieron los monopolios públicos a actores privados. Eso ha sido aplicado no solo en sectores como el de los ferrocarriles, autorutas, agua, correos y comunicaciones, pero también en el de la educación y la salud. Los resultados de esas privatizaciones han sido mitigados, y ha sido con frecuencia más difícil de lo que se pensaba lograr que las empresas privadas se comporten en la forma deseada”, dijo el comité Nobel a propósito de la contribución del economista francés, quien recomienda a los gobiernos asegurarse que los reguladores no se conviertan en los abogados de las firmas que en principio deben vigilar, en el marco de una situación asimétrica en términos de acceso a la información; dado que el gobierno dispone de menos información sobre la realidad del mercado.
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