Llevo en mis recuerdos, notables imágenes de una Cuba avivada por el deseo de seguir surgiendo. Atravesamos algunas horas en cómodos buses adecuados para la labor turística, casi gran parte del nororiente de la isla.
Guaguas son llamadas por el común de la gente, estos buses de Transtur, empresa que estuvo encargada de movilizar a casi 130 periodistas de casi 35 países visitantes a este evento de tremendo alcance. Su edición 35, a decir de los asiduos concurrentes anuales, es la mejor versión hasta ahora realizada.
Una mezcla de tradición, fiesta general, confort y mucha, pero mucha amabilidad, es el coctel que los invitados bebimos a diario, en estos casi 12 días de interminable experiencia subyugante. Desde el recibimiento en cada hotel, restaurante, recreo, instalación o playa; la fiesta era el denominador común. La música y el baile dibujaban más de una sonrisa en los hombres y mujeres de prensa, que contagiados por el ritmo de Chan Chan o de algún son conocido, disparábamos flashes a ese mismo ritmo.
Podría escribirse mucho sobre cada destino o anécdota y probablemente así será durante un mes más, porque faltarán líneas que describan la organización, no solo de la misma feria, sino sobre todo, de las actividades post feria a las que los periodistas de América, Europa y Asia fuimos invitados, con gran generosidad.
No podemos dejar de mencionar la gran labor desplegada por el Ministerio de Turismo, sin duda desde aquí tomaron forma todos los planes que luego compartieron con nosotros. Un programa nutrido, variado y mostrando lo mejor del mundo náutico de Cuba fue la constante de cada día. El Mintur destinó una importante inversión para preparar la llegada de la FitCuba en Jardines del Rey. Su organización fue de primer nivel y de ello fuimos testigos los periodistas, visitantes y empresarios turísticos de más de 35 países del orbe.
Si tuviéramos que dividir en capítulos esta entrega, tendríamos que empezar por la sede de la realización de la feria: Cayo Coco, el principal eje de la zona, es también la cuarta isla en extensión del archipiélago cubano, con 370 kilómetros cuadrados y 22 kilómetros de playa. Cerca de allí, los cayos Guillermo y Santa María, también están incluidos en los planes de desarrollo turístico.
Las playas, fueron en esta primera impresión, el principal atractivo del lugar con una suma de 38 kilómetros, con aguas cristalinas y fondos, que permiten visualizar estrellas de mar y corales a lo largo de toda su extensión, como bien sucedió desde nuestra experiencia.
Los espacios para esta edición son reducidos y los adjetivos para describir las vivencias sobran, solo podemos añadir, en esta oportunidad, que la hospitalidad de Cuba, va muy bien de la mano con la importante infraestructura turística desarrollada en estos años y que han catapultado a Cuba, como uno de los mejores actuales destinos turísticos del planeta.