70% de los incendios son por fallas eléctricas

En la actualidad las casas en Perú tienen entre 20 a 50 aparatos eléctricos, mientras que hace 25 años solo tenían 5.  Este nuevo escenario hace que se use 8 veces más energía que antes.

Este incremento de artefactos eléctricos trae consigo el aumento en el número de tomacorrientes o que se sobrecarguen los existentes con múltiples y/o supresores, pero sin cambiar los cables para que puedan soportar esta nueva carga energética, ocasionando consumos adicionales de energía.

Además, esta situación ha permitido un aumento del 80% en el número de incendios por cortocircuito y accidentes por electrocución.  Estos casos alarmantes se viven principalmente en la capital, en donde según el Cuerpo General de Bomberos Voluntarios del Perú, a nivel nacional se registran 31 incendios por día, 17 de ellos en Lima.

La investigación a cargo de Procobre y de organizaciones aliadas, cuyo objetivo es promover la seguridad y prevención a favor de los ciudadanos, refiere entre otros aspectos, que lo principal para evitar las fallas eléctricas es conocer cuáles son los factores de riesgo, los mismos que se detallan a continuación:

1.- Instalaciones Antiguas, Peligro Inminente

Las edificaciones antiguas no están preparadas para resistir el aumento de la demanda eléctrica. En Perú hay más de 5 millones de edificaciones y el 60% de ellas se construyeron hace más de 20 años. El riesgo aumenta si el producto es de “mala calidad” (falsificado), si se producen daños en los cables durante su instalación o si el material aislante está en mal estado pues puede originar un cortocircuito.

2.-Autoconstrucción

El 60% del mercado de la construcción están representado por la autoconstrucción. Los usuarios elaboran sus propios diseños y realizan instalaciones eléctricas sin tener la capacitación técnica y sin conocer la normatividad vigente. 50% de esas construcciones son inseguras debido al envejecimiento y los nuevos hábitos de consumo.

3.-Exposición a la sobrecarga

Esto ocurre cuando varios artefactos funcionan al mismo tiempo, conectados a un solo tomacorriente.  La sobrecarga origina recalentamiento en el cable y el riesgo de un corto circuito.  

4.-Falta de mantenimiento

 Las instalaciones requieren una revisión periódica por personal certificado para verificar el correcto funcionamiento de los equipos.  Solo el 14% de los usuarios invierte en mejoras como recableado total o parcial y actualiza su instalación.

5.-Mal uso o falta de sistemas de protección

Antes se usaba el fusible, hoy son obligatorios los dispositivos de protección de corte automático y el sistema de puesta a tierra. Aún no existe un adecuado cumplimento de lo establecido en los códigos, normas y reglamentos vigentes. Por ejemplo, sólo el 67% cumple con las exigencias de disponer el calibre (diámetro) mínimo de conductor.

6.-Productos de mala calidad

Los productos muy económicos por lo general incumplen las normas y son un riesgo. La falsificación de productos eléctricos ocupa el segundo lugar después de los fármacos. Además, según el IEC Counterfeiting Brochure Document & EPEI-PERU, 1 de cada 5 productos eléctricos son subestándares y/o falsificados y lo que es más alarmante es que el 80% de los usuarios compra productos falsos con pleno conocimiento de su condición.

7.-Fallas en aparatos y/o artefactos eléctricos.               

Debido al deterioro de los cables eléctricos de los artefactos, su cubierta metálica puede quedar energizada y causar leves descargas eléctricas.

 8.-Otros

Instalaciones provisionales, ubicación inadecuada de artefactos eléctricos, posibilidad de chispas cerca de materiales inflamables, cercanía a zonas húmedas, entre otros. No obstante lo anterior, el 85% de los usuarios se siente seguro en el lugar donde vive.

Recomendaciones

Por ello es crucial contar con instalaciones seguras y tener en cuenta las siguientes recomendaciones:

-      Que las instalaciones eléctricas sean diseñadas e instaladas por profesionales que garanticen el cumplimiento de las normas.

-      Que los productos empleados sean de calidad y estén dentro de los estándares permitidos. Invertir en buenos productos es la clave para que se mantengan en buen estado.

-      Que estas instalaciones sean bajo el procedimiento adecuado para garantizar que tengan las condiciones necesarias de seguridad y no se encuentren cercanas a zonas en donde se pueda generar peligro.

-      Revisar las instalaciones con cierta frecuencia y darle mantenimiento, para garantizar que estén en estado adecuado.

-      Además es un deber el contar con una cultura de uso responsable de la energía por parte de todos los usuarios,  para evitar realizar acciones que puedan generar sobrecargas eléctricas,  entre otras situaciones peligrosas.

Para conocer más sobre instalaciones seguras y otras iniciativas de Procobre puedes visitar la página: http://procobre.org/es/