Viernes 26 de abril 2024 | Contáctenos
Estados Unidos instó a todas las naciones a cortar las relaciones diplomáticas y comerciales con Corea del Norte después de la última prueba de misiles balísticos del país.
Hablando en el Consejo de Seguridad de la ONU, el enviado estadounidense Nikki Haley dijo que el presidente Trump le había pedido a su homólogo chino que cortara el suministro de petróleo a Pyongyang. Ella dijo que Estados Unidos no buscaba un conflicto, pero que el régimen de Corea del Norte sería "completamente destruido" si estallaba la guerra.
La advertencia se produjo después de que Pyongyang probara su primer misil en dos meses.
Corea del Norte dijo que el misil lanzado el miércoles, que según dijo llegó a una altitud de 4.475 kilómetros (más de 10 veces la altura de la Estación Espacial Internacional), portaba una ojiva capaz de reingresar a la atmósfera terrestre.
El reclamo no fue probado y los expertos han arrojado dudas sobre la capacidad del país para dominar esa tecnología. Sin embargo, el líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, llamó al lanzamiento "impecable" y un "avance".
La prueba, uno de varios este año, ha sido condenada por la comunidad internacional y el Consejo de Seguridad de la ONU convocó a una reunión de emergencia. La Sra. Haley advirtió que los "continuos actos de agresión" solo servían para desestabilizar aún más la región.
El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, dijo que las sanciones se habían agotado. "Los estadounidenses deberían explicarnos a todos nosotros lo que están tratando de hacer: si quieren encontrar un pretexto para destruir a Corea del Norte, deberían aclararlo, y los líderes estadounidenses deberían confirmarlo", dijo a los periodistas.
Previamente, el embajador de la ONU en Rusia dijo que Corea del Norte debería suspender sus pruebas nucleares y de misiles, pero también pidió a Washington que cancele los ejercicios militares con Corea del Sur planificados para diciembre, ya que "inflamaría una situación ya explosiva".
China también sugirió que Corea del Norte debería detener las pruebas a cambio de detener los ejercicios militares de Estados Unidos, una propuesta que Washington ha rechazado en el pasado.
"Necesitamos que China haga más", dijo Haley el miércoles. "El presidente Trump llamó al presidente Xi esta mañana y le dijo que hemos llegado al punto en que China debe cortar el petróleo para Corea del Norte. "Sabemos que el principal impulsor de su producción nuclear es el petróleo", dijo. "El principal proveedor de ese petróleo es China".
China es un aliado histórico y el socio comercial más importante de Corea del Norte, y se cree que Pyongyang depende de China para gran parte de sus suministros de petróleo.
Previamente el miércoles, la Casa Blanca dijo que Trump habló por teléfono con Xi Jinping, instándolo a "usar todas las palancas disponibles para convencer a Corea del Norte de que ponga fin a sus provocaciones y vuelva al camino de la desnuclearización".
Hablando en Missouri, el líder estadounidense ridiculizó a Kim, describiéndolo como un "cachorro enfermo" y un "pequeño hombre con cohetes".
El Sr. Xi respondió diciéndole a Trump que era el "objetivo inquebrantable de Pekín para mantener la paz y la estabilidad en el noreste de Asia y desnuclearizar la península de Corea", informó la agencia de noticias china Xinhua.
Los expertos dicen que la altura alcanzada por el misil balístico intercontinental (ICBM) indica que Washington podría estar dentro del alcance, aunque Corea del Norte todavía tiene que demostrar que ha alcanzado su objetivo de miniaturizar una ojiva nuclear.
El misil Hwasong-15, descrito como el "más poderoso" de Corea del Norte, fue lanzado en la oscuridad el miércoles temprano.
Aterrizó en aguas japonesas, pero voló más alto que cualquier otro misil que el Norte había probado previamente.
Los medios estatales chinos culpan a Estados Unidos por su nueva prueba de misiles, que descarta que Corea del Norte sea un estado patrocinador del terrorismo. Un editorial en el Global Times dijo que la política de Estados Unidos sobre Corea del Norte "no había sido más que un fracaso abismal" al suponer erróneamente que podría obligar a Pyongyang a abandonar su programa de armas al aplicar más presión sobre el país.
El periódico advirtió que China "no apoyaría una nueva ronda de tácticas de presión de la administración Trump", pero también recordó a Corea del Norte que la comunidad internacional nunca lo aceptaría como un estado con armas nucleares.
"Washington ha puesto a China en una situación precaria al pedir más de lo que originalmente esperaba el Consejo de Seguridad de la ONU con respecto a la ronda previa de sanciones contra Corea del Norte.
Cargando...