Desubicados

Mg Jorge Luis Martínez, autor de estas líneas

“En cuanto a este gobierno, yo tengo la firmísima confianza de que somos un gobierno totalmente limpio. Errores hay, sin duda, pero no son robos ni corrupción, son errores que se corrigen, las personas se van para ayudar a corregir los errores, como ha ocurrido en el último día en un caso”, dijo Pedro Pablo Kuczynski en el marco de una entrevista al final de la semana pasada. No quepa duda, nuestro primer mandatario es un personaje ubicado fuera de la realidad; cree que los peruanos olvidamos rápido. ¿Acaso no tuvo un asesor presidencial de apellido Moreno que precisamente fue cesado en sus funciones por un caso de corrupción y no por un “error” como él lo señala? Olvida que en diciembre pasado se libró por un pelo de la vacancia gracias a la ayuda, a cambio del indulto, del señor Fujimori. No es consciente que aparecen más pruebas de su oscura participación en la trama de Odebrecht, junto con su empresa y su ex asesor, el señor Sepúlveda.

En otro momento de la misma entrevista, nuestro primer mandatario señaló que “Nuestras autoridades judiciales, a cambio de una colaboración eficaz, están dándole una tribuna a gente que certificadamente fue corrupta y que hoy se han transformado en grandes acusadores”, haciendo referencia, no cabe duda, al señor Barata, quien hace poco en el Brasil donde, al igual que a otros dirigentes de otros partidos políticos, puso contra las cuerdas a la embajadora peruana en el Reino Unido. Pedro Pablo Kuczynski debería tener más cuidado con lo que dice y, debería asimismo, recordar que el impulso el proyecto de la construcción de la Carretera Interoceánica con el Decreto Supremo 012 y el Decreto de Urgencia 016. Dispositivos legales que facilitaron la liberación del SNIP de este macro proyecto y aumentaron el tope de compromisos financieros por parte del Estado. Tal como lo ha señalado en la Comisión Lavajato el ex Ministro Carranza.

Así las cosas, el día de ayer la Premier Mercedes Araoz, la segunda persona en importancia después del Presidente de la Republica dijo lo siguiente en relación a la Ley Mulder: “Yo sí creo en la libertad de expresión y de prensa. Son herramientas fundamentales para sostener la democracia. La ley que prohíbe la publicidad estatal bloquea el contacto del Estado con la población; y cortar el derecho a comunicar es quitarles derechos a los ciudadanos.” La Premier da muestras de patética desubicación. Dicha Ley ha sido propuesta para disminuir el gasto público. En su lugar habría que agradecer, pues nos encoentramos en épocas de vacas flacas y en nuestro país todavía hay muchas necesidades. No obstante, en lugar de preocuparse por la Reconstrucción del Norte o el abastecimiento de medicinas en los Hospitales Públicos, a nuestra Premier le interesa más la billetera de los dueños de los medios de comunicación y de las agencias de publicidad. El tema de fondo es que quieren publicitar lo que no hacen, seguir gastando millones de soles en publicidad de algunos ministros para que puedan subir en las encuestas de opinión; un campo en el que en realidad inspiran pena. Nuestra Premier debería saber que para tener aceptación tiene que caminar con sus Ministros e ir a dar a los hospitales del Estado. Acompañar a sus ministros de Vivienda y Agricultura en las visitas de campo a fin de ver in situ el estado en el que se encuentra la construcción de las obras en nuestro país, a fin de saber qué se ha hecho por la Reconstrucción.

Desde esta tribuna, exigimos un poco seriedad a los dos principales funcionarios del Estado. El pueblo peruano no está contento con su gestión. El pueblo peruano es consciente que ambos están desconectados con la realidad y, lamentablemente, con la verdad. Es por eso que en las encuestas de opinión sus porcentajes de aceptación se encuentran por los suelos. Un Presidente de la República sin credibilidad atenta contra la viabilidad de su propio gobierno. Esto puede terminar muy mal.