El Ministerio de Energía y Minas aún no entienden problemática del gas natural en Piura

Por: César Gutiérrez

Hace una semana los Viceministros de la cartera de Energía y Minas, se presentaron ante la Comisión de Energía y Minas. Atípica presencia, el Ministro delegó en sus viceministros las exposiciones, cuando correspondía escucharlo a él sobre la visión que tiene, así como percibir el ejercicio de su liderazgo.

El resultado fue desastroso, una avalancha de generalidades que no auguran nada bueno en un ministerio que hace cerca de cuatro años que anda sin rumbo. Pero no solo eso, sino que se escucharon desatinos, como el expresado por el flamante Viceministro de Hidrocarburos, Eduardo Guevara, quien afirmó que estaban evaluando el otorgamiento de la concesión de distribución de gas natural en la región Piura, a la empresa de capitales colombianos, Gases del Norte del Perú SA (Gasnorp).

El Viceministro no se ha informado que sobre el caso Gasnorp, hay por lo menos dos temas pendientes: el primero, un informe de la Contraloría General de la República (CGR), que ya lleva ocho meses de trámite sin pronunciamiento, que puede derivar en declarar nulo todo lo actuado desde diciembre del 2013, sobre la gestión de solicitud de parte para la concesión, por parte de Gasnorp. No se debió dar curso al pedido, cuando había desde mayo del 2011 un contencioso administrativo en el Juzgado Civil Transitorio de la ciudad de Talara, por la derogatoria de dos resoluciones supremas (RS), con las que se caducó la concesión que tenía para el distrito de Pariñas, la empresa Gases de Talara SA (Gastalsa).  El segundo tema, aún sin solución, es que la sentencia emitida por el Juzgado de Talara ordenando la restitución de la concesión a Gastalsa, ha sido apelada por el propio Ministerio de Energía y Minas (MEM). La vista de la causa está programada para el próximo día 28 en la Sala Civil de la Corte Superior de Sullana, debiendo esperarse sentencia para el mes de junio.

Mientras estos dos temas estén en cartera, desde el MEM, no se podrá tomar decisión alguna, salvo que haya vocación de infringir leyes. Resulta extraño que el Ministro Francisco Ísmodes, que ya tiene varias semanas en el despacho de la Avenida Las Artes, del mesocrático distrito de San Borja, no le haya informado antes a su Viceministro, para evitar este desliz en el Palacio Legislativo, salvo que él esté mal informado y se encamine a intentar a cometer una barbaridad normativa