Al menos ocho personas, incluidos dos británicos, murieron y otras desaparecieron tras una inundación repentina en la isla española de Mallorca.
Una enorme ola de agua fangosa envolvió la ciudad de Sant Llorenç des Cardassar, al este de la isla, después de que un río irrumpiera en sus orillas tras las fuertes lluvias.
Vehículos fueron arrastrados mientras el agua brotaba de las calles estrechas. El ejército español ha asignado más de 100 trabajadores de emergencia y perros rastreadores.
El área fue golpeada con más de 8 pulgadas (20 cm) de lluvia en tan solo unas horas este martes 9 de octubre, según la agencia meteorológica española Aemet.
Las autoridades establecieron un refugio en el centro deportivo Miguel Ángel Nadal en la ciudad de Manacor para proporcionar refugio a los residentes desplazados. Y convocaron una reunión de emergencia para coordinar los esfuerzos de rescate el miércoles después de las fuertes lluvias.
El primer ministro español, Pedro Sánchez, tuiteó: "Mi solidaridad y apoyo se extienden a las familias y amigos de las víctimas y a todos los afectados por estas trágicas inundaciones". Pedro Sánchez visitará las áreas afectadas por las inundaciones más tarde este miércoles 10 de octubre.