Población vulnerable en permanente estado de emergencia

De acuerdo al INEI (2018), la pobreza en nuestro país alcanza el 20.5 % de la población (659,3000), mientras que la pobreza extrema el 2.8% (90,000). Para contrarrestar esta lamentable situación el Estado implementó -desde hacía muchos años atrás- diversos programas.

Entre ellos, tenemos el Programa de Vaso de Leche dirigido a niños de 0 a 6 años, madres gestantes y/o en período de lactancia, sostenido con recursos transferidos por el Ministerio de Economía y Finanzas a las Municipalidades Provinciales y Distritales. El año pasado, el MEF transfirió S/ 372 millones (RM N° 214-2018-MIMP), beneficiando a cerca de 1 millón de hogares, aunque con serias deficiencias en su distribución (Gestión, 12.05.2019, refiere que según COMEX el 60.2% no calificó para dicho otorgamiento). Asimismo, el Programa Qali Warma (PNQW), de alimentación escolar para niños a partir de los tres años, cuyo presupuesto del 2019 ascendió a S/ 1,676,300 millones beneficiando a 4 millones de niños; así como el Programa Cuna Más (PNCM), de alimentación escolar para niños menores de tres años (incluyendo el acompañamiento a familias para madres gestantes y niños menores de 36 meses), cuyo presupuesto del 2019 fue de S/ 454 millones beneficiando a más de 163 mil niños y niñas. Estos dos últimos programas a cargo del MIDIS.

Con relación al Adulto Mayor, personas con 60 años o más, son aproximadamente 3,500,000 personas que representan el 12% de la población. Oportunamente, la Defensoría del Pueblo (Informe de agosto 2019) advirtió que el 18% no cuenta con afiliación al sistema de salud, mientras que el 45,87% de los adultos mayores y el 56,08% de las adultas mayores no recibe ningún tipo de pensión. Atendiendo a esto último, el gobierno implementó -a cargo también del MIDIS- el Programa Pensión 65 que beneficia actualmente a 431,000 personas.

Adicionalmente, está la población migrante (especialmente venezolanos) que suman alrededor de 860 mil, de los cuales el 18.7% son niños y adolescentes y el 1.6% adultos mayores (Canal N, 27.06.2019).

Todas estas personas, consideradas vulnerables por contar con escasos -o nulos- recursos para subsistir por sí mismas, debido a la cuarentena dispuesta por el gobierno se encuentran desprotegidas por el propio Estado (salvo beneficiarios de Pensión 65), incrementándose con ello el riesgo para ellos de sufrir -o agravarse- de alguna enfermedad relacionada con la mala alimentación y/o cuidado que debiera brindárseles (Vg. anemia, hipertensión, etc.).

Nuestro Mister President cumplió años y lo celebró discretamente (como se suponía) pidiendo que nos quedemos en casa para evitar la propagación de la pandemia del Covid-19. Podríamos talvez ampliar su deseo post onomástico en que la población vulnerable -al término de su mandato- deje de serlo o se reduzca drásticamente casi al mismo ritmo con que su inmaculada popularidad sigue cuesta arriba.