Biden ganó, ganó el cambio

 
La victoria de Biden representa el rechazo a una política racista blanca y demagógica dirigida por una persona enferma de narcisismo y ansias de ganancia ilegales , que lamentablemente dividió en dos a EUA.

Una política equivocada que trajo abajo los acuerdos multilaterales existentes en favor del cuidado de la naturaleza y el mantenimiento de la paz en el Medio Oriente y otras zonas calientes del mundo.

Una política de gobierno irrespetuosa y prepotente ante las minorías nacionales y los tradicionales aliados internacionales de EUA, que la mayoría de los electores estadounidenses ha, felizmente, rechazado.

Ahora Biden tiene la oportunidad de reunificar al país, combatir científicamente el C19, reactivar selectiva y convenientemente la economía, recuperar el atraso tecnológico en el uso de energía no tradicional y sentar las bases para cambiar la tendencia declinante de EUA ante la tendencia ascendente de China y otros países del Asia.