Desde que el Apra expulsó a Andres Townsend Ezcurra perdió al último gran intelectual norteño que le quedaba. Estamos hablando de 1980.
El Apra gana la alcaldía de Chiclayo en los ochentas es cierto pero desde los noventas le son esquivos los éxitos electorales. Trata de restituir su aura intelectual con la llegada de la filial aprista de la Universidad San Martín pero hasta ahora no logra pasar de maestrantes de gestión pública.
Los intelectuales y escritores en Lambayeque se han dado cuenta que la cátedra e investigación mal pagan e inventan eventos como el Fexticum que es una feria comercial costumbrista en Monsefu creada por el profesor Limberg Chero Ballena.
Esta es la mayor constatación de la realidad dura en esta tierra. No hay cabida para lo intelectual pero si para lo fenicio comercial. De no comprenderlo así solo cabe la marginalidad a todo nivel. Vender libros no es vender papas pero se aprende