Rezagos del terrorismo en el VRAE son movidos fundamentalmente por el narcotráfico

Los rezagos del terrorismo que operan en el valle de los ríos Apurímac y Ene (VRAE) son movidos fundamentalmente por el narcotráfico y el interés económico de esa ilícita actividad, dijo hoy el ministro de Defensa, Rafael Rey, al descartar que esos remanentes sean un riesgo para el país.

Desde la zona del VRAE, el ministro sostuvo que en esa jurisdicción el interés de los rezagos es más económico, aunque admitió que no dejan de tener ideología, “de manera que hay una mezcla pero que es fundamentalmente movida por el narcotráfico”.

Refirió, no obstante, que los rezagos en la zona del Alto Huallaga tienen una línea más de carácter ideológico.

El titular de Defensa consideró, asimismo, absurdo que en los últimos días se haya generado una polémica señalando que tales rezagos representan un peligro para el país.

“Para el país, para el Perú, para la democracia y el estado de derecho, evidentemente el rezago del terrorismo no representa un peligro”, enfatizó.

No obstante, admitió que para la gente que vive en el VRAE, para los militares y policías que tienen que enfrentarlos, por supuesto que significa un peligro, y por esa razón es deber de todos de tratar de que se acabe lo antes posible.

Comentó que si bien el terrorismo está focalizado, lamentablemente este se ha ido extendiendo ya que durante muchos años de descuidó por completo la zona del VRAE.

Agregó que le ha tocado a este gobierno enfrentar un problema que ya se había permitido que creciera porque no se tomaron las precauciones del caso.

Indicó que es necesario avanzar con la obra de infraestructura que si se ha hecho en la zona del Alto Huallaga, concretamente carreteras, que es la que justamente permite que los programas de sustitución de cultivos tengan éxito.

Dijo que mientras no haya vías de comunicación que permitan a los campesinos sacar sus productos a los mercados, no hay forma de que los programas de sustitución de cultivos sean exitosos.

De otro lado, cuestionó que algunos países de Europa permitan actividades de apología al delito.

Señaló que eso es indignante y que en estos días, con ocasión de que se cumplen 30 años de los primeros actos del terrorismo en el país, se anuncien conferencias en algunos lugares de Europa.

“Nuestra Cancillería estoy seguro que está tomando cartas en el tema, porque es una labor que le correspondería claramente a nuestras embajadas en el exterior hacer ver a los gobiernos que eso no es otra cosa que el fomento del terrorismo que generó tanto dolor y daño humano y material en nuestro país y en el mundo, pues todos sufren acciones del terrorismo”, subrayó.

Andina