Fueron hallados los cadáveres del fiscal que inició la investigación de la masacre de 72 inmigrantes en el estado mexicano de Tamaulipas y del jefe policial del pueblo donde ocurrió la matanza.
Roberto Jaime Suárez, el fiscal investigador, y Juan Carlos Suárez, secretario de seguridad del poblado de San Fernando, estaban desaparecidos desde el pasado 24 de agosto, tras acudir a la hacienda donde ese mismo día se descubrió la masacre para realizar un informe preliminar.
Los cuerpos fueron localizados en el municipio de Méndez, a unos 50 kilómetros de San Fernando. Junto a ellos se encontraron identificaciones que permitieron establecer plenamente sus nombres, confirmó la Fiscalía de Tamaulipas.
Las autoridades demoraron en confirmar su desaparición, denunciada al día siguiente por sus familiares, e incluso se especuló que podrían haber huido tras las amenazas del cártel de ‘Los Zetas’, señalado como autor de la masacre.