Benedicto XVI condenó en Birmingham el nazismo, que denominó "ideología demoniaca", y dijo que 70 años después de la "Batalla de Inglaterra" recuerda "con horror y vergüenza" el "estremecedor número de muertos y destrucción" de la guerra.
El Papa alemán hizo estas declaraciones durante la beatificación del cardenal John Herry Newman, y en el aniversario de la Batalla de Inglaterra, una serie de operaciones en cielo británico en las que la fuerza aérea alemana trató en vano de destruir a la británica para lograr la superioridad aérea que facilitara una invasión de las islas.
"Para mí, que he vivido y sufrido los largos y tenebrosos días del régimen nazi en Alemania, es profundamente conmovedor estar aquí y recordar a tantos conciudadanos vuestros que sacrificaron sus vidas, resistiendo con tesón a las fuerzas de esta ideología demoníaca", afirmó el Papa ante unas 70.000 personas reunidas en el Cofton Park.